Carlos Soler jugará cedido un año en la Real Sociedad
El centrocampista aterrizará en Zubieta en cuanto se terminen de concretar diferentes flecos del contrato
La Real Sociedad ya tiene el tercer fichaje del verano. Carlos Soler jugará una temporada como cedido en Anoeta tras llegar en las últimas horas a un acuerdo con el PSG, equipo con el que tiene contrato hasta 2027 pero que no cuenta para Luis Enrique. El valenciano podría aterrizar hoy mismo a la capital guipuzcoana para firmar su nuevo contrato como jugador txuri-urdin. Ambos clubes también barajan la posibilidad de implementar una opción de compra puesto que la idea tanto del jugador como de la Real es intentar que llegue en propiedad el próximo verano. De momento, será jugador txuri-urdin hasta el 30 de junio 2026 reforzando aún más un centro del campo en el que Sergio tiene muchas herramientas y perfiles diferentes.
La Real se ha lanzado a por el valenciano al entender que Soler era una magnífica oportunidad de mercado, sin olvidarse todavía de un Yangel Herrera que sigue apretando para salir del Girona puesto que su deseo también es jugar en Anoeta. Soler termina contrato en 2027 después que el PSG pagara 18 millones de euros por él, pero Luis Enrique no cuenta con el jugador y le descartó a principios de verano hasta tal punto que ni siquiera fue convocado para el Mundial de Clubes donde los parisinos cayeron en la final ante el Chelsea. El asturiano le dejó claro que no entraba en sus planes por lo que el centrocampista ha buscado destino durante todo el verano. Su principal deseo siempre fue volver a la Liga tras una experiencia poco gratificante en París donde no contó con demasiadas oportunidades. El Valencia tanteó su situación, pero sin lanzarse a por él mientras que en cuanto supo del interés de la Real comunicó a sus agentes que tratara de hacerse la operación.
Los contactos entre la Real y el futbolista no son nuevos puesto que la dirección deportiva txuri-urdin, con Olabe al mando, ya sondeó la posibilidad de fichar al centrocampista durante otros veranos. De hecho, el año pasado, tras la salida de Mikel Merino al Arsenal también hubo conversaciones, pero las altas exigencias económicas del conjunto parisino complicaron la operación. La Real se lanzó entonces a por un perfil como Luka Sucic; un joven tremendamente talentoso, mucho más joven y que tiene posibilidad de dejar mucho dinero en las arcas del club si progresa como se espera. La llegada del valenciano no mueve ni un ápice la idea de la Real con Sucic para lo que resta del mercado de fichajes. Ni viceversa. El croata solo piensa en triunfar con la elástica blanquiazul y quiere darle la vuelta a un inicio de temporada un tanto irregular tras su mal partido ante el Espanyol.
Sin pretemporada como tal
Carlos Soler aterrizará en Donostia sin realizar una pretemporada al completo puesto que Luis Enrique le dejó bien claro desde el principio que no tenía sitio en el PSG. El valenciano, como cualquier futbolista profesional en la actualidad, no ha dejado de entrenarse durante este periodo, aunque el parón de selecciones le vendrá de perlas para coger ritmo. Soler no tendrá problemas para adaptarse a la Real, que le ha seguido durante un tiempo hasta poder conseguir sus servicios.
El PSG quería deshacerse de él y su opción principal era un traspaso para no entrar en el último año de contrato del jugador, pero finalmente los dos clubes han formulado la posibilidad de concretar un préstamo. Veremos qué sucede a partir del mes de junio, aunque si todo transcurre con normalidad y el futbolista rinde, por parte del centrocampista no habría problemas en continuar su carrera en la Real firmando un contrato de larga duración.
Con Soler ocurre algo parecido que con Gonçalo Guedes y Caleta-Car. Los tres tienen en común que son futbolistas muy talentosos, que tenían un potencial tremendo para dominar en el fútbol europeo pero que por una cosa o por otra no terminaron de rendir acorde a las expectativas generadas. Los tres han entendido que Zubieta es el magnífico escenario para relanzar sus carreras deportivas. Del mismo modo, la dirección deportiva también ha cambiado algo el foco con los tres primeros fichajes de la era Erik Bretos. Por mucho que Guedes sea el único que venga en propiedad, el portugués y Caleta-Car son de 1996 y cumplen 29 años en noviembre y septiembre respectivamente, mientras que Soler, del año 1997, acaba de cumplir los 28. La Real subirá la media de la plantilla tras varios años buscando perfiles más jóvenes.
Amigos en el vestuario
Como cada futbolista que entra por primera vez en el vestuario de la Real Carlos Soler será recibido con los brazos abiertos por los que serán sus nuevos compañeros, pero lo cierto es que el valenciano ya tiene amigos antes de llegar. Soler ha compartido dos temporadas en el Valencia con Gonçalo Guedes, con el que «tenía muy buena conexión». El interior se salió del mapa junto a Guedes durante dos temporadas, en la 20/21 y en la 21/22. Uno voló al PSG a cambio de 18 millones mientras que el otro salió por 32 a los Wolves de Inglaterra. No será su única cara conocida. Soler mantiene una magnífica relación con Oyarzabal -y Zubeldia-, con el que coincidió en el europeo sub-19 de 2019 y en la plata olímpica de Tokio 2020.