Jon Bautista se exhibe en su vuelta a Zubieta

En la Real Sociedad, que jugó en 1-4-3-3, lo más destacado fue la actuación de un Cho que, además de estrenar su cuenta goleadora en verano, se mostró muy incisivo arrancando desde la derecha, tanto para encarar en acciones de uno contra uno como para dibujar diagonales con las que descargar en banda contraria. Hasta puso un gran centro a pierna cambiada al 'estilo Silva' que Turrientes cabeceó con intención para que se luciera Yoel en el minuto 19.

La otra noticia positiva en el bando txuri-urdin estuvo en la actuación de Silva, que después de no jugar ante Osasuna y Bournemouth, completó 60 minutos a buen nivel demostrando que está en perfectas condiciones para actuar en Cádiz. El Eibar, con un férreo 1-4-2-3-1 que ofreció pocas concesiones atrás, fue el rival perfecto para que el canario tuviera una última prueba exigente antes del estreno liguero. Tardó en encontrar espacios por los que maniobrar, pero en el tramo final de la primera parte se destapó con tres pases que recordaron que la Real juega al ritmo que él propone.

El primero fue uno interior a Isak que Berrocal, muy bien en todo el partido, evitó que fuera a mayores. En el segundo, también un servicio de derecha a izquierda para el sueco, éste remató con comba al palo largo pero su remate no le cogió el suficiente efecto. Y en el tercero dejó solo a Ander Martín ante Yoel pero el donostiarra se arrugó ante la salida del meta azulgrana y no pudo conectar el mejor disparo.

Por lo demás, la primera parte no fue demasiada pródiga en llegadas, ya que además de esas tres apenas hay que anotar otra al inicio de Isak tras gran pase de Cho que salvó Yoel. El Eibar, que jugaba bien a partir de robo, avisó en un cabezazo de Berrocal en un córner que salió desviado y en un disparo lejano de Matheus ante el que metió bien la mano Arana.

El once de Imanol contenía pocos titulares, más allá de Silva, Isak o Cho, y además tuvo la baja de última hora de Sola por unas molestias en el muslo izquierdo que le obligó a jugar con Jokin Gabilondo en el lateral derecho. El de Garitano tiene pinta de arrancar la Liga la próxima semana, más allá de la entrada de Stoichkov en la banda izquierda. Una circunstancia a tener en cuenta antes de extraer muchas conclusiones del amistoso.

En la segunda parte llegaron los goles a partir de las intervenciones de Bautista. Anteriormente ya había sujetado bien varios balones para que se estirara la línea de tres cuartos y forzó alguna jugada hasta línea de fondo para centro posterior atrás. Pero en el minuto 46 aprovechó un balón al espacio de Sergio Álvarez para pillar descolocada a la zaga blanquiazul y abrir una grieta. Aritz había salido de zona para una disputa aérea y fue Pacheco el que tuvo que ir en falta a apagar el incendio después de que el delantero armero le ganara la posición. Arbilla, desde la frontal del área, ejecutó con maestría el libre directo.

Poco después, en una buena acción de presión de los de Garitano con Javi Muñoz forzando la pérdida de Guevara, el balón le cayó a Bautista a 30 metros de la portería. Pacheco cometió el error de recular en lugar de encimarle y el de Errenteria tuvo la picardía y la calidad para sorprender con una vaselina a Arana.

A la hora de juego Imanol dio entrada a Urko, Olasagasti, Navarro y Karrikaburu por Guevara, Silva, Martín e Isak. La Real imprimió otro ritmo y bien liderado por Navarro acortó distancias en un jugadón suyo en el que dio un gol regalado a Cho con Urko y Turrientes en el inicio de la acción combinativa. En esa última media hora los seis blanquiazules más ofensivos tenían una media de 20 años. Pero Garitano metió a Venancio para jugar con tres centrales junto a Berrocal y Arbilla en un 1-5-4-1 y el Eibar conservó sin apuros su ventaja en el tramo final.