José Ignacio Asensio: «Maddalen Iriarte debe aclarar si volverá al puerta a puerta, a abrir vertederos o exportar la basura fuera»

–Competirá en un escenario de mayoría de mujeres aspirantes a diputado general de Gipuzkoa. ¿Le deja en desventaja?

–Lo veo como un síntoma de normalidad que ya era hora que llegara. Los que impulsamos la leyes de igualdad, las listas cremallera y los primeros que presentamos mujeres, incluso para lehendakari, hemos sido los socialistas. Creo que las últimas palabras de Ortuzar tampoco son las más edificantes cuando dice que ha habido un exceso de machismo en el PNV. Espero que sea algo más que una campaña de marketing de ese partido.

–¿Cómo ve el regreso a la cita electoral de «viejas glorias» de la política como les definió Andueza?

–El PSE va a tirar de la gente que en estos momentos está en la gestión. Vamos a repetir con todos los alcaldes socialistas que ahora mismo ostentan su cargo y eso quiere decir que el PSE es un partido que da mucha estabilidad institucional al territorio. Nosotros no hemos hecho operaciones de marketing, lo que hemos hecho es responder de nuestras acciones de gobierno.

–Pero, de entrada, las encuestas sitúan a su contrincante Maddalen Iriarte como la líder vasca más valorada después del lehendakari.

–No tengo nada contra Maddalen Iriarte, pero seguramente no se le conoce una mala palabra ni una buena acción. Es una recién llegada a la política realmente y su capacidad de gestión está por demostrar.

–¿Está listo para una larga precampaña en un tiempo de crisis plagado de incertidumbres?

–Estoy preparado para seguir trabajando todos los días. Venimos a diario a la Diputación, visitamos todos los pueblos del territorio, estamos con todos los colectivos que peor lo están pasando y buscamos soluciones conjuntamente con la ciudadanía. Nosotros no tenemos que hacer campañas de socialización o participación ciudadana porque lo hacemos todos los días. No estamos todo el día 'cacareando' que van a venir inversiones millonarias de fuera, lo que hacemos es, por ejemplo, poner al servicio de la ciudadanía los paneles solares, crear comunidades energéticas locales donde la gente ya se está ahorrando en torno a 500 euros al año y con listas de espera como en Zumarraga, Lasarte, Andoain, Eibar... Todos ayuntamientos socialistas. Nosotros hemos pasado a los hechos.

–La mayoría absoluta les ha dado tranquilidad esta legislatura, pero en la oposición les critican por falta de ambición. Póngase nota.

–Tenemos un notable alto como gobierno y los diputados socialistas, si me apura, sobresaliente en algún caso, como el de Rafi Romero, con la enorme y magnífica labor que ha hecho en el transporte público guipuzcoano, que ha sido reconocido como el servicio público más valorado por la ciudadanía. En Cultura, Deporte, Cooperación y Juventud, si algo nos reconocen es que hemos respetado la pluralidad de esta sociedad. Nosotros no hemos perdido ni un segundo en aventuras o ensoñaciones soberanistas.

–¿Y la oposición?

–Ha sido bastante inoperante y ha estado ausente. Ahí sí que no se conoce ninguna propuesta ni en positivo ni en negativo.

–¿Cómo es su relación con el diputado general, Markel Olano?

–La relación personal es excelente. En lo político, la verdad es que últimamente hemos tenido un desencuentro importante. Su intervención en el pleno de política general estaba de sobra. No me sentí para nada identificado y creo que la ciudadanía guipuzcoana tampoco. Hizo un discurso que nada tiene que ver con la gestión de la Diputación, donde no se ha tratado nada de lo que dijo sobre el derecho a decidir y otros planteamientos. Me pareció inapropiado.

–¿Cómo se lleva con Eider Mendoza?

–Muy bien en lo personal, es una persona amable, nos conocemos hace mucho tiempo. Es verdad que tiene un perfil marcadamente independentista y es lo que nos diferencia bastante.

–¿Los guipuzcoanos se van a tener que apretar el cinturón ante el duro otoño e invierno que se avecinan, a pesar de que el territorio cuenta con una recaudación fiscal récord?

–Ese es el gran problema que tenemos. Estamos viviendo una crisis inflacionaria, eso nos empobrece a todos y más al que menos tiene. Y por tanto hay que responder con ayudas directas a los que peor lo están pasando y hacer ajustes fiscales como estamos haciendo. Eso es lo que garantiza el PSE.

–¿Cuál es su propuesta de reforma fiscal?

–Hay que hacer una reforma fiscal, pero evidentemente la próxima legislatura. Estamos tomando medidas, que muchas son coyunturales, y algunas habrá que pensar si las mantenemos en el tiempo. Hay que hacer un esfuerzo de mayor progresividad en los impuestos, claramente, porque sino va a ser muy difícil que mantengamos las políticas sociales directas que tienen que ser impecables. Me comprometo a que el 50% del Presupuesto de la Diputación, cuanto menos, se destine a políticas sociales.

–¿La solución pasa también por elevar los impuestos a las energéticas y a la banca?

–Tendremos que detraer recursos de aquellos que están ganando muchísimo. Los beneficios no caen del cielo, los pagamos todos y sobre todo las familias que tienen hipoteca y viven de su trabajo. Desde la Diputación tenemos que ser los recaudadores de esos impuestos a la banca y a las grandes eléctricas, por mucho que proteste Sánchez Galán. Muchos de esos impuestos serán de aplicación directa e inmediata y esperemos que para el 1 de enero de 2023 estén en vigor.

–¿Cuál es la verdadera fotografía del empleo en el territorio? ¿Y qué planes tiene en ese terreno?

–En Gipuzkoa estamos con un índice de paro en torno al 8% y estará por debajo de los 30.000 parados. Pero estas personas tienen cara y ojos, más de la mitad son mayores de 45 años y hay más mujeres que hombres. En este terreno, estamos impulsando políticas como Elkarrekin Lanean con itinerarios personalizados de la mano de Lanbide, de Idoia Mendia.

–¿Gipuzkoa está mejor preparada que otros territorios vascos para afrontar la crisis energética?

–Hay muchísimo por hacer. Todos los territorios tenemos una enorme dependencia energética. Teníamos que haber actuado muchísimo antes, no tengo ninguna duda. Ahora bien, en Gipuzkoa sí hemos emprendido el camino, hicimos nuestra estrategia de lucha contra el cambio climático, que muchas veces suena a papel mojado, pero es justo lo contrario, lo que hicimos fue poner el foco precisamente en dos aspectos: la economía circular y la transición energética. Impulsemos aquellas energías que dependen de nosotros, como las renovables.

–¿Le ha sorprendido que EH Bildu no vea con malos ojos el proyecto eólico de Statkraft?

–EH Bildu lo que hace aquí es cambiar absolutamente de opinión y bienvenida sea. Pero a las cosas hay que llamarles por su nombre. Históricamente, se han opuesto a hacer todo tipo de planteamientos de este tipo y en estos momentos entran en sus propias contradicciones. Yo no tengo nada en contra de este proyecto, siempre y cuando se respeten los parámetros medioambientales. Todo proyecto que tenga esta capacidad de generación de energía renovable es bienvenido.

–¿Aunque el reto de los residuos está encarrilado, podría volver a ser motivo de polémica si EH Bildu gana el 28-M, dado que Maddalen Iriarte no ha explicado aún sus intenciones?

–Aquí lo que le hay que pedir a Bildu es claridad, cosa que la candidata o no sabía o no quería o ninguna de las dos cosas. Que los ciudadanos sepan si quieren volver al puerta a puerta, a abrir vertederos o a que viaje la basura guipuzcoana, que por cierto no se la van a coger a ningún sitio. Nosotros hemos generado aparte de buenas condiciones medioambientales, un montón de puestos de trabajo, hemos logrado que ese dinero se quede en Gipuzkoa y somos un referente a nivel internacional europeo. Por lo tanto, que sea Bildu quien diga qué quiere hacer. Y, por cierto, insinuaciones de Maddalen Iriarte, las justas. ¿Contratos y transparencia? No habido otro proyecto con tanta transparencia como el de la incineradora en ningún sitio. Que nos cuenten ellos qué hicieron cuando paralizaron el proyecto en 2011, a quién pagaron, por qué pagaron y a cuenta de qué. Le recuerdo que en el Consorcio de Residuos hay representación de Bildu y tienen toda la información. Entonces, insinuaciones de estas, ninguna. Si quiere hacer insinuaciones tiene los juzgados o que lo diga claramente. Los contratos están todos publicados. Que diga claramente si hay vuelta atrás o no.

–¿Le preocupa una polarización de la campaña entre PNV y EH Bildu?

–Gipuzkoa no se merece tener una polarización de nadie, sino estar bien representada en las instituciones. Yo me voy a esforzar muchísimo en explicar el modelo socialista que precisamente es la superación de esos bloques que además solo están en un lado, nacionalismo y más nacionalismo. Vamos a respetar la pluralidad de la sociedad tal y como es y para eso la garantía es el PSE. Vamos a ser la llave y la garantía de que la polarización no es la solución para Gipuzkoa. Esa polarización les interesa solo a los nacionalistas, a PNV y a Bildu. Y claro que lo van a intentar, pero los guipuzcoanos no están condenados a elegir entre PNV y Bildu, todo lo contrario, lo que necesitan es un PSE que les responda en las instituciones a sus necesidades y den soluciones a sus problemas reales. ¿O es que durante la pandemia alguien se acordaba de la independencia?

–¿Ve posible el regreso de EH Bildu al liderazgo foral?

–Los ciudadanos son libres de elegir lo que quieran. Ahora, que tengan en cuenta qué supuso el paso de Bildu por las instituciones. Y también un mensaje al PNV: si gobernó Bildu fue porque ellos le dejaron. No tenía mayoría absoluta y no la va a tener ahora tampoco. Tendremos que llegar a acuerdos entre diferentes.

–¿Si EH Bildu le llamara para compartir un gobierno foral, qué haría?

–El PSE siempre pondrá su programa encima de la mesa como hicimos con el PNV. La verdad es que me siento muy identificado con el programa de gobierno que hemos llevado adelante en los últimos ocho años.

–¿Y si coincidieran en los proyectos, estarían dispuestos a gobernar con la izquierda abertzale?

–Para gobernar tenemos un mínimo ético que lo vamos a mantener. Todo lo que tenga que ver con los derechos humanos, el reconocimiento a las víctimas y la reparación hay que respetarlo por encima de todo. Hasta que ese mínimo ético no lo tengamos absolutamente acordado, evidentemente acuerdos de largo plazo serán difíciles. Otra cosa son los acuerdos puntuales que ya los estamos viendo, todos los partido acuerdan con todos. Por encima de todo hay que tener muy claro para qué gobernamos. Y yo aspiro a ser determinante y liderar los gobiernos.

–¿Quiere decir que Maddalen Iriarte no comparte claramente ese mínimo ético?

–No juzgo, lo tendrá que decir ella. Además en este tema ha sido muy tibia.