Alfonso Alonso: «El PNV quiere nuestros votos, pero sus últimas decisiones revientan cualquier acuerdo presupuestario»

-Tal y como están las cosas, ¿prevé una repetición electoral en España?

-Pedro Sánchez está jugando irresponsablemente a repetir las elecciones. Quiere ver si es capaz de meter un bocado a Podemos y con ello mejorar la posición del PSOE.

-¿PSOE y Unidas Podemos acercarán posturas o su ruptura es definitiva? ¿Los puentes entre Sánchez e Iglesias están dinamitados?

-Los pasos que veo últimamente son para alejarse y no para acercarse. En cualquier caso, la perspectiva de un Gobierno del PSOE con Podemos es mala para España.

-¿El PP podría abstenerse, tal y como solicitó Sánchez, que alega que el PSOE ya lo hizo para facilitar la investidura de Rajoy?

-Es curioso porque Sánchez dimitió para no tener que abstenerse. Luego echó a Rajoy del Gobierno de manera injusta apoyándose, entre otros, en Bildu. No hay ninguna posibilidad de que el PP apoye al PSOE, al menos mientras siga Sánchez y no busque espacios de confluencia con nosotros en la visión de España, en las reformas económicas y en la situación de Cataluña. Camina en dirección contraria y es el que apuñaló por la espalda a Rajoy. Sánchez será conocido por dinamitar puentes. Lo hizo con el PP y Ciudadanos, y ahora lo hace con Podemos.

-En caso de celebrarse elecciones el 10 de noviembre, ¿se complicarían los Presupuestos vascos?

-Lo que hay que tener en cuenta es que desde que el PNV apoyó la moción de censura a Rajoy, en los últimos meses ha ido tomando todas las decisiones que puedan entorpecer un acuerdo con el PP. En Navarra y en el País Vasco ha llegado a un pacto con EH Bildu para echar al PP allí donde hemos ganado. Están reventando cualquier opción de acuerdo con nosotros. Y las palabras edulcoradas de Urkullu nada tienen que ver con los gestos hostiles permanentes de su partido hacia el PP.

-En un contexto electoral, ¿el PP vasco tendría libertad para negociar?

-Sí, tengo libertad para tomar decisiones. Las comento y las suelo compartir.

-¿Se sentarán a dialogar con el PNV?

-O se aborda una reforma fiscal seria o no hay nada que hacer. Lo que han hecho en Navarra es una ofensa política directa hacia nosotros.

-Pero la fiscalidad es una competencia legislativa de las Juntas Generales y no del Gobierno Vasco...

-Cuando pactamos los Presupuestos fue condicionado a un cambio en el Impuesto de Sociedades y se hizo. El acuerdo se alcanzó entre partidos y se ejecutó en las respectivas instituciones. Fue un pacto respetuoso con la foralidad de las competencias de las Juntas Generales. El lehendakari no puede tratar a los parlamentarios como si fueran funcionarios. Quiero pactos políticos. Si no avanzamos en esta dirección, no me interesa. No lo puedo decir con mayor claridad, pero supongo que no me toman en serio. El PNV presume constantemente de lo que no tiene, de buena gestión. ¿Cómo puede hacerlo si no es capaz de ejecutar su Presupuesto?

-¿Hasta dónde llegaría con la reforma fiscal? ¿La Comunidad de Madrid es un espejo en el que mirarse?

- Competimos fiscalmente con Madrid. Muchos contribuyentes y gente joven se van allí, donde encuentran oportunidades. Aquí tenemos el corsé apretado. Hay que hacer atractivo al País Vasco. El Concierto Económico es una de las herramientas más potentes que tenemos y de la que carecen los demás.

-¿La reforma de la RGI para evitar el fraude es otra condición?

-No lo es. En leyes sectoriales he trasladado nuestra posición al Gobierno y me he mostrado abierto a negociar para que la legislatura no quede en blanco. Desligo la reforma de la RGI de la negociación presupuestaria. Solo he hablado de la reforma fiscal y las condiciones políticas, que se han traducido en una agresividad del PNV hacia el PP. Han intentado que el clima político sea el peor posible.

-¿Y romper las bases del nuevo estatus con EH Bildu?

-Quieren engañar a todo el mundo a la vez con esto, pero la negociación está encallada. Si se lanzan, sería una ruptura tan profunda que nos llevaría directamente a la situación de Cataluña.

-¿Incluso como para aplicar el artículo 155?

-No, pero tensionaría y dividiría a la sociedad vasca. Entiendo que no darán ese paso porque sería muy irresponsable. Me parece muy frívolo coquetear con esa idea. Les pido que la aparquen, no ganamos nada con ella.

-Si no salen las Cuentas, ¿debería haber un adelanto electoral? Urkullu ha afirmado que no sería «un drama» prorrogarlas de nuevo.

-Si se adelantan las elecciones, dependerá de si el lehendakari acepta su fracaso o no. El PNV se siente fuerte políticamente por las circunstancias, pero está esperando a que le den algo de Madrid para venderlo como un gran triunfo. Que le ofrezcan unos kilómetros de autopista, se lo parece. Queda un año de legislatura y debería agotarlo y tener capacidad de entendimiento, pero veo difícil que tenga margen para corregir sus actuaciones de los últimos meses.

-¿Han cerrado definitivamente la puerta a una coalición 'Euskadi Suma' para las elecciones autonómicas, con Ciudadanos y quizá Vox?

-No veo que haya ningún planteamiento al respecto. Para nosotros hay algunas cuestiones que son irrenunciables, como la defensa de la foralidad y el Concierto Económico. Esa es nuestra línea roja.

-¿Ve factible que Ciudadanos replantee su posición sobre la foralidad y el Concierto Económico como hizo en Navarra?

-En las elecciones municipales hice una oferta a Ciudadanos porque en Navarra habían aceptado el régimen foral. Y puse como condición hacer lo mismo aquí, pero no quisieron y no sacaron representación. Desde luego, nosotros no vamos a variar nuestro proyecto.

-En caso de que Ciudadanos aceptara ese viraje, ¿estarían dispuestos a coaligarse con ellos?

-Sería especular mucho. Hasta dentro de un año no hay elecciones y ellos no tienen ningún cargo representativo aquí.

-¿La coalición puede funcionar en otras comunidades?

-Más allá de los cálculos matemáticos o de los 'Sumas' que se puedan formar, hay que dejar clara la postura política. Uno puede tener diferencias, pero los temas principales tienen que estar marcados. Yo de lo que advierto es sobre los asuntos especialmente sensibles en el País Vasco y para el PP vasco.

-¿Y a nivel nacional?

-Pero es que todavía no se ha explorado la propuesta política conjunta que se podría hacer, que tiene que buscar lo común, pero que no puede implicar la renuncia a principios fundamentales para el PP.

-¿Génova se equivoca al apostar por una candidatura generalizada que aglutine el voto del centro derecha? ¿Puede el PP recuperar terreno para hacer frente a Pedro Sánchez sin coaligarse con Ciudadanos y Vox?

-Yo creo en el PP. El objetivo es recuperar el espacio que tenía. Es un partido grande y tiene que volver a tener un resultado grande. Esa tiene que ser la prioridad. Desde Madrid quieren unificar el centro derecha y lanzar ese mensaje, pero por otra parte, Ciudadanos y Vox han descartado esa opción. Es evidente que Rivera no quiere coaligarse, que querría sustituir al PP.

-¿Y Vox? ¿Lo descarta como compañero de viaje?

-Es un partido con el que se puede llegar a acuerdos puntuales, pero no para hacer una lista conjunta porque las diferencias que tenemos son grandes y profundas. No veo ninguna posibilidad de acuerdo con una formación que, por ejemplo, quiere acabar con el modelo de las autonomías y el régimen foral y secular del País Vasco y Navarra.

-¿Propuestas como la de 'España Suma' ahondan las diferencias entre el PP nacional y el vasco?

-Apoyamos el proyecto de Pablo Casado, queremos que sea presidente y vamos a contribuir para que lo sea. Para eso tenemos que defender nuestra señas de identidad como vascos dentro del PP y no hay que tener ninguna timidez al hacerlo.

-¿Cómo es su relación con Pablo Casado?

-Estamos en contacto. Es una relación cordial en lo personal. Comprendo las dificultades de coger las riendas de un partido en una situación difícil y tener que sacarlo adelante. Lo que quiero es ayudarle. Como mejor se ayuda es siendo como uno es, aportando algo, porque no sumas si no tienes una personalidad propia.

-Pero Casado ha apuntalado su liderazgo interno sin dar cabida al perfil más moderado del PP vasco.

-Yo aquí sigo y no me he radicalizado. Espero que podamos seguir un mensaje de moderación.

-Después de las elecciones de abril y mayo pusieron sobre la mesa la reclamación a Madrid de poder contar con un acento propio. ¿Confían en que Génova les conceda más autonomía?

-No esperamos que nos la conceda, la tenemos. Somos leales, pero no vamos a cambiar porque es lo que siempre hemos defendido en el País Vasco y nuestra manera de estar integrados en el proyecto del PP.

-¿El discurso de Casado perjudica al PP vasco?

-Estamos de acuerdo en las cuestiones políticas fundamentales, pero es evidente que si el resultado en los comicios fue malo, hay cosas que considerar respecto de la campaña o sobre cómo fue recibida la propuesta.

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