«No vamos a bajar las armas como pide Putin»
Pese a una nueva noche «muy difícil, muy dura», este antiguo monitor de la Asociación Chernobil asegura que no va a abandonar su país y que no se van a rendir
I.G.
Sábado, 26 de febrero 2022, 14:52
48 horas después de que Putin comenzara su intervención militar en Ucrania, Igor Likhvanchuk sigue intentando dejar atrás el horror de la guerra en busca de una situación más tranquila en la zona occidental del país. Eso sí, este antiguo monitor de la Asociación Chernobil tiene claro que no va a abandonar Ucrania. «Nosotros seguimos nuestro camino a la frontera, no tenemos planeado abandonar el país sino cambiar de ciudad. El país nos necesita y nosotros realizamos nuestra labor para una futura victoria en esta guerra», señala.
La situación no ha ido a mejor precisamente en las últimas horas, con los rusos asediando Kiev, la capital. «Esta noche fue muy difícil, muy dura - afirma Igor Likhvanchuk resignado-. Los soldados rusos comenzaron a atacar las ciudades más importantes de Ucrania, su meta es dominar la capital y poner allí a un presidente que Putin pueda controlar. En estos días tan difíciles, la sensación que tenemos es inexplicable».
Noticia Relacionada
El Kremlin abre una vía endeble al diálogo
Igor Likhvanchuk asegura que «hay muchos muertos entre los civiles pero también de los soldados rusos». Eso sí, lo que más le llama la atención es la edad de los militares de las tropas de Putin, «niños de 18-20 años que están aquí y no entienden lo que están haciendo». Sea como fuere, tiene claro que no se van a rendir ante la invasión de Rusia y confía en la fortaleza del ejército de su país. «No sé cómo vamos a sobrevivir otra noche más pero estoy seguro de que nuestro ejército nos va a defender. Nosotros no vamos a bajar las armas como pide Putin. La gente está saliendo a las calles, coge las armas y empieza a defender sus casas, su territorio, su país», asegura.
Y hace un llamamiento: «A los líderes del mundo quiero pedirles que piensen qué más debe ocurrir para que empiecen a hablar, para que vean la cara y la meta de Putin, que no es otra que la de renovar su imperio ruso».