El tráfico vuelve a la normalidad en la muga tras una jornada complicada en Biriatou
Las retenciones han llegado a ser de hasta siete kilómetros por la mañana y durante la tarde han llegado a ser de cinco
mikel calvo
Miércoles, 10 de agosto 2022
La normalidad ha vuelto a la frontera de Biriatou tras una jornada complicada debido a las restricciones de tráfico provocadas por el incendio que arrasa la Gironda y las Landas. Francia ha reabierto el paso a media mañana después de que a las 7.00 horas haya sido cerrada a vehículos de más de 7.500 kilogramos.
Pasadas las 11:30 horas, cuando aún se mantenía cerrada la frontera para camiones, las colas superaban los siete kilómetros en la muga. Las autoridades galas habían decidido cerrar «por precaución» el paso a camiones a raíz del incendio en las Landas originado este martes en la Gironda, entre Hostens y Saint-Magne, a 216 kilómetros de la frontera. El fuego, por su parte, avanza «sin control» y ha arrasado cerca de 7.000 hectáreas de pinos en menos de 24 horas, ha destruido 17 viviendas en Belin-Béliet y ha obligado a evacuar a 10.000 personas.
Además del paso fronterizo de Biriatou, también se ha abierto parte de la autopista A-63. Así, Francia ha anunciado a la una de la tarde que los vehículos ligeros ya pueden volver a circular por la A-63 entre Baiona y la salida de Liposthey (n°17), en ambos sentidos de circulación. Sin embargo, esta autopista permanece cerrada entre este enlace y el cruce A63/A660. El Departamento de Tráfico de Francia también ha informado que se están registrando leves retenciones en la A-63 a la altura de Barrière de Benesse-Maremne.
A partir de ahí, se abren dos opciones para los vehículos ligeros que se dirigen a Burdeos: la primera es cruzar Ychoux, Parentis y Sanguinet hasta la A660 y la segunda es dirigirse hacia el este por Pissos, Soreo y Saint-Symphorien hasta Langon y el cruce de la A-62. El desvío por la A64, A65 y A62 sigue siendo obligatorio para los camiones.
Desde ayer permanecía cortado el paso a cualquier tipo de vehículo desde la salida 9 de autopista francesa, situada en Saint-Geours-de-Maremne, justo después de la salida 8 que emplean muchos guipuzcoanos para dirigirse a destinos vacaciones como Hossegor o Capbreton.
Las jornadas de ayer y hoy están siendo extremadamente difíciles para las autoridades galas y vascas. Como medida preventiva, la Ertzaintza había restringido la circulación a vehículos pesados en la A-1 a partir del kilómetro 385, a la altura de San Millán (Álava) en sentido Irun, pero ya ha vuelto a la normalidad.
Camioneros atrapados
En cualquier caso, no se descarta que durante la jornada este jueves y viernes se vayan modificando algunas rutas alternas establecidas debido al incendio, informa el diario francés 'Sud-Ouest'. La idea, según informa el diario galo, es que las autoridades francesas realicen pruebas de descarga de tráfico por rutas secundarias durante este fin de semana del 15 de agosto. La Ertzaintza estaba a la espera de la reunión entre la Gendarmería y la prefectura de Pau, convocada a las 09:00 horas de este jueves, en la que se ha decidido reabrir la frontera para los camiones.
Unos 1.100 bomberos continúan trabajando sobre el terreno en Gironda y las Landas para extinguir las llamas, donde han estado apoyados por hasta cinco hidroaviones Canadairs, dos aviones Dash y dos helicópteros combaten el fuego desde el aire. Varios efectivos han resultado heridos de diversa consideración por la virulencia de las llamas. Entre ellos un bombero sufrió quemaduras graves en las piernas y la cara aunque se encuentra fuera de gravedad.
Ayer se cortó durante más de seis horas el paso fronterizo. A las 21:30 horas la muga volvió a reabrirse por unas horas, pero a las 7:00 horas de esta mañana se ha vuelto a cerrar la frontera para los camiones, lo que está provocando nuevamente una gran densidad de tráfico en la zona.
La dirección de Tráfico del Gobierno Vasco informaba este miércoles del cierre de la frontera en torno a las 16.00 horas. Cientos de camioneros se vieron atrapados en la AP-8 y sin posibilidad de continuar su ruta en dirección Francia. Hacia las seis de la tarde se llegaron a registrar retenciones de hasta siete kilómetros entre los peajes de Biriatou y los de Irun.
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Ante esta situación, Tráfico tomó la decisión de desviar a los camiones por vías alternativas como la N-121-A, otros camioneros optaron por regresar a los puntos de origen, mientras que muchos se decantaron por parar y esperar en estaciones de servicio como la de Oiartzun que a última hora de la tarde de este miércoles se encontraba «prácticamente completa». Los turismos, por su parte, pudieron circcular con normalidad, ya que el carril izquierdo en dirección Francia seguía habilitado.
La Policía Foral de Navarra también informó a los conductores en el peaje de Zuasti (A-15) en Pamplona que la frontera se encontraba cerrada para los vehículos pesados.
