Las autoridades francesas sospechan que el incendio de las Landas ha sido intencionado

La magnitud del incendio que asola el suroeste de Francia es de tal magnitud que varios países europeos se han movilizado para auxiliar al país en sus esfuerzos por, primero, tratar de controlar el fuego y, después, por extinguirlo. Según anunció el presidente galo, Emmanuel Macron, efectivos de Alemania, Grecia, Polonia, Rumanía y Austria acudirán en ayuda de sus compañeros franceses ante la gravedad de los incendios. «Nuestros socios europeos acuden en ayuda de Francia frente a los incendios. Gracias a ellos. ¡La solidaridad europea está en marcha!», indicó el dirigente en su cuenta de Twitter.

De este modo, cuatro aviones de la flota de la Unión Europea contra incendios fueron enviados desde Grecia y Suecia a la zona en llamas, hacia donde también se encaminaron equipos de bomberos de Alemania, Polonia, Austria y Rumanía. Tras constatar el salvavidas comunitario, el hombre encargado de la gestión de la crisis, Janez Lenarcic, subrayó en un comunicado que «la Unión Europea es totalmente solidaria cuando un país está confrontado a una situación de emergencia». Lenarcic precisó que en las próximas horas se esperaba la llegada de «360 recursos» europeos», algunos de los cuales llegarán esta misma mañana.

El Gobierno francés tiene serias sospechas de que el incendio que azota desde el martes el suroeste del país haya sido intencionado. Así lo aseguró ayer la primera ministra, Elisabeth Borne, durante su visita a la zona afectada por el fuego para seguir el operativo de extinción 'in situ'. Según informó la política, se ha abierto una investigación para tratar de esclarecer las causas de este desastre natural, pero precisó que «dada la brutalidad de la reanudación del fuego, sospechamos una acción criminal».

El país vecino se encuentra especialmente preocupado por la ola de incendios que viene registrando en las últimas semanas. En total se han quemado más de 40.000 hectáreas este año en todo el territorio, según las autoridades, aunque las mediciones vía satélite arrojan una cifra aún mayor, de hasta 50.000 hectáreas. Estos registros multiplican la media anual de los 15 años precedentes, tal como viene sucediendo en España y Portugal.

Este hecho ha llevado a Francia a reforzar sus medios contra incendios. Según explicó ayer Elisabeth Borne sobre el terreno, «cuando el presidente de la República vino a Gironda el mes pasado, anunció que íbamos a reforzar nuestros medios de intervención». En este sentido, detalló que «desde entonces hemos pasado de dos helicópteros que 'bombardean' agua a nueve, y este fin de semana lograremos dos más». Estos refuerzos elevarán a once el número de aeronaves, prueba del «compromiso» del Gobierno galo para hacer frente a los incendios.

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