La nueva estación del TAV en San Sebastián comenzará a funcionar en octubre de 2023

La consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, presentó este jueves los detalles de la remodelación de la estación de Atotxa, unos trabajos que arrancarán en abril del próximo año y contarán con un presupuesto de licitación de 97 millones. Euskal Trenbide Sarea ejecutará la obra y Adif (Ejecutivo central) supervisará y financiará los trabajos.

La consejera estuvo acompañada en la presentación pública del proyecto, que ya adelantó este periódico, por el delegado del Gobierno en Euskadi, Jesús Loza, y el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia. Este último inició su discurso «pidiendo disculpas» a la ciudadanía por la coincidencia en los próximos años de varias obras de calado en el Centro -la estación y la pasante del Topo- que pueden alterar la rutina de sus vecinos, aunque subrayó que los trabajos «transformarán a mejor la ciudad».

Sea como fuere, se espera que los trabajos en Atotxa arranquen la próxima primavera, para el mes de abril. El Gobierno Vasco, a través de Euskal Trenbide Sarea , ha sacado a licitación las obras, que cuentan con un presupuesto de 97 millones de euros y un plazo de ejecución de 42 meses. «La obra ferroviaria y la urbanística estarán finalizadas para 2023», subrayó la consejera, dejando claro que el calendario marcado sigue vigente y el planteamiento de no retrasarse más allá de 2023 sigue marcado a fuego.

La inversión total en la nueva estación, sin embargo, ascenderá a 101,5 millones, sumando la reposición de servicios afectados y el 1,5% destinado a los trabajos de conservación o enriquecimiento del patrimonio, entre otras tareas.

Atotxa se convertirá así en la primera de las tres terminales de la Y vasca que se construirán en las capitales de la comunidad y cuya edificación corresponderá además al Ejecutivo autonómico, a raíz de la ampliación de la encomienda de la ejecución del tramo de Gipuzkoa por parte del Ministerio de Fomento en 2017. En esa ampliación también se incluyeron las paradas de Ezkio y de Astigarraga.

Las otras dos estaciones en las capitales vascas, que serán soterradas y requerirán de una inversión mucho más elevada que la guipuzcoana, todavía se encuentran en fase de estudio informativo.

El proyecto de Donostia, firmado por la UTE Eptisa Cinsa-Jon Montero, contempla la reconstrucción del edificio actual de la estación, que mantiene la fachada y suma dos nuevas plantas, y la remodelación de la playa de vías para funcionar con dos andenes para cercanías de tres hilos y tres andenes para larga distancia y alta velocidad.

La nueva terminal se integra en la arquitectura actual de la Estación del Norte y el entorno de Tabakalera, a la vez que impulsará la conexión entre diferentes medios de transporte: cercanías, alta velocidad y autobuses. El proyecto ofrece a su vez una respuesta integral a los flujos peatonales entre Egia-Centro.

Además, el proyecto permitirá construir sobre estas vías una gran plaza pública cuya cota de pavimento coincidirá con la de la primera planta del edificio Tabakalera, con la que tendrá acceso directo.

Para mitigar el 'efecto sótano' que pudiera generar esta plaza de 6.000 metros cuadrados se abrirán dos espacios que facilitarán la entrada de la luz natural hacia la planta inferior de la estación y del edificio del centro de cultura contemporánea. La estación incluirá vestíbulos inferiores de cercanías y largo recorrido a los que se podrá acceder también desde el pasadizo de Egia, que será mejorado.

El proyecto recoge además dos aspectos condicionados por la propia normativa municipal como son la conservación de la actual marquesina, obra del ingeniero francés Jean Biarez, colaborador de Alexandre Gustave Eiffel y, de la columnata enfrentada con el puente de María Cristina, conocida como 'Puerta de Brandemburgo'.

Durante la ejecución de las obras, se ha previsto la construcción de una estación provisional ubicada enfrente del edificio actual con acceso por la plaza de Nestor Basterretxea.

El alcalde Eneko Goia puso énfasis en tres elementos importantes que «mejorarán la calidad de la ciudad» con estas obras. En primer lugar, la creación de la nueva plaza sobre la playa de vías y que convivirá con Tabakalera. «Será una de las plazas más grandes de la ciudad y nuestro cometido será el de llenarla de contenido», apuntó el primer edil donostiarra. En el extremo sur de la plaza se ha previsto una plataforma ligeramente inclinada (6% de pendiente) para facilitar su multiplicidad de usos.

En segundo término, Goia explicó la importancia de darle «una segunda vuelta» al pasadizo de Egia, que ya se mejoró con la construcción de la estación de autobuses y que ahora se ampliará más. Y en tercer lugar, subrayó la importancia para la movilidad de la ciudad de contar «con una estación para el TAV».