Juicio a los padres de un bebé en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa. Lobo Altuna

Juicio en la Audiencia Provincial

La niña llegó «en estado muy grave» al Hospital Donostia, donde «no se le detectaron enfermedades genéticas»

Los médicos que trataron al bebé en el centro donostiarra relacionan los síntomas con el síndrome del niño zarandeado, pero no lo confirman

Martes, 9 de septiembre 2025, 12:27

La niña de apenas dos meses llegó «en estado muy grave» al Hospital Donostia tras estar ingresada durante cerca de una semana en la Policlínica por «una posible infección de orina». Ya en el centro hospitalario donostiarra, entró en «estatus convulsivo» y fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátrica. Allí se le realizaron pruebas analíticas que «descartaron una enfermedad genética y no se encontraron genes alterados». No obstante, se localizaron «síntomas compatibles con el síndrome del niño zarandeado», aunque no se confirmó la causa. Este es el diagnóstico de los médicos que trataron al bebé de dos meses presuntamente zarandeado por alguno de sus progenitores, que se enfrentan a siete años y siete meses de cárcel por un delito de asesinato en grado de tentativa.

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La segunda sesión del juicio que se está celebrando esta semana en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Gipuzkoa estuvo marcada por las aportaciones de los testigos perito. Ha intervenido personal médico tanto de Policlínica Gipuzkoa como del Hospital Donostia. Respecto al primero, donde la pequeña estuvo ingresada varios días antes de ser trasladada al segundo, han destacado que «las pruebas realizadas tras el parto eran para descartar malformaciones internas», ya que la niña presentaba «ciertas anomalías físicas que, si bien no indican nada, requieren de comprobaciones». En dichas pruebas, sin embargo, «no se encontraron enfermedades».

El pediatra que estuvo en contacto con el bebé en el día del traslado al Hospital Donostia ha explicado que «comenzó a sufrir alteraciones en la glucosa, se sentía aletargada y luego exaltada». Estos síntomas forzaron el traslado por necesidad de «mejores medios pediátricos». La médico que recibió a la niña a su llegada al Hospital Donostia ha recalcado en su comparecencia que llegó «en estado muy grave, su vida corría peligro». Según ha relatado la profesional, la pequeña «comenzó a convulsionar y la trasladamos a la UCI». Entonces, se le realizaron varias pruebas para detectar las lesiones, en este caso encefalopatía aguda, hemorragias retinianas dispersas e hipertensión intracraneal. La menor tuvo que ser «intubada» y el personal sanitario consiguió «controlar las convulsiones en 24-48 horas». Una semana después, la niña «mostró mejoría y fue extubada».

La sanitaria del Hospital Donostia ha dejado claro que «la prioridad del equipo era salvar la vida y minimizar las secuelas». Aun así, a preguntas del ministerio fiscal, ha añadido que «no se detectaron enfermedades de base que pudieran provocar esas lesiones», sugiriendo que «lo más compatible con los resultados de las pruebas que hicimos es el síndrome del niño zarandeado».

Hemorragias abundantes

Durante la sesión también ha comparecido la oftalmóloga del Hospital Donostia que realizó la prueba de fondo de ojo a la pequeña. «Presentaba hemorragias retinianes abundantes en ambos ojos. Pueden existir otras causas raras, pero el diagnóstico más frecuente en estos casos es el del síndrome del niño zarandeado». Según ha informado la experta, «hoy en día no se conocen causas genéticas que provoquen esas hemorragias».

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