Una marea de moteros por la seguridad
2021 nefasto. Cientos de motoristas circularon en Donostia para pedir «que mejoren las carreteras» en un año trágico marcado por 11 fallecidos
«Nosotros cumplimos con la ley que dictan las administraciones. Y ellos deberían cumplir con lo que prometen: garantizar que todo está en buenas condiciones para nuestra seguridad». Javier Gutiérrez, vicepresidente del Club Donosti Motards, denuncia que la seguridad de los motoristas no está garantizada en las carreteras de Euskadi y España. Por su parte, Harkaitz Imaz, portavoz en Euskadi de la plataforma ciudadana Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas, lamenta que «llevamos años manifestándonos sin que se nos escuche». Así, más de 500 motoristas circularon este domingo por las calles de Donostia para reclamar «seguridad vial» en este nefasto 2021 marcado por el fallecimiento de 11 motoristas, dos más que en todo 2020.
Las manifestaciones se extendieron por todo el país en 27 ciudades españolas. En San Sebastián la columna de manifestantes arrancó motores alrededor de las 12.20 horas junto al Aulario de la UPV, en el barrio del Antiguo. Tras una hora de rodaje por los distintos barrios de la ciudad, llegaron a las 13.30 al Boulevard. Allí, una vez estacionados en mitad de las vías, emitieron un manifiesto en el que, «amparados en distintos artículos de la Constitución», alzaron la voz «por el derecho a la vida, a la seguridad y a la movilidad en libertad, para que se cumplan de una vez por todas y las administraciones respeten el ordenamiento jurídico». Acto seguido tuvo lugar un minuto de silencio «por los compañeros caídos» en las carreteras. Cientos de cascos se alzaron al cielo en honor y homenaje a los aficionados del mundo del motor que perdieron la vida sobre las dos ruedas de sus vehículos.
Socavones y aceite en las vías
Fueron varios los clubes, colectivos y asociaciones moteras de la zona las que se acercaron a Donostia a reclamar por las más de 20 peticiones que recoge el manifiesto y que atañen, en su mayoría, a la mejora de las condiciones de las carreteras así como su señalización. «Reclamamos que solucionen muchos obstáculos con los que nos encontramos a diario los motoristas en las carreteras que no están en buen estado», explica Jose Ángel Dominguez, presidente de la asociación motera Bikers Urola Kosta. Dominguez señala, entre otros obstáculos, las caídas de ramas, las manchas de aceite o los socavones que les hace perder el control de los vehículos.
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Enfundados con los chalecos azules identificativos de su asociación, sus integrantes lamentan que, «por desgracia, todos tenemos algún conocido o compañero que se ha quedado en la carretera. Esperemos que nos hagan caso». De ser así, «la siniestralidad bajaría bastante».
Criminalización del motero
Además de denunciar las condiciones de las vías, los aficionados moteros congregados este domingo en Donostia también alzaron la voz para protestar por la criminalización de los motoristas tras los siniestros en los que se ven involucrados. «Parece que los culpables de esas muertes son los propios moteros y siempre remiten a que iban rápido, cuando no siempre es así». Alegan que las manchas de aceite o los socavones en las carreteras son uno de los principales obstáculos que les hace perder el control de sus vehículos, causar accidentes y, en el pero de los casos, perder la vida.
En la misma línea, la reivindicación de la asociación Moteros Navarra alega que «muchas veces, por evitar un bache o una mancha de aceite, supone frenar bruscamente e irte al suelo». Algo que «puede acabar muy mal» y «siempre se culpabiliza al motero».
El colectivo navarro, ante la ausencia de manifestación en Pamplona, se desplazó hasta Donostia para hacerse oír: «Las administraciones miran cosas que no son esenciales y dejan en segundo plano otras que sí lo son como la protección de guardarraíles, el mantenimiento de carreteras o la señalización de peligros».
Desde Irun, Bruno Hernández y sus amigos sacaron sus motos para sumarse a la protesta en la capital guipuzcoana. «No es la primera vez que venimos ¿cuántos años se lleva organizando esto? Hemos venido tres veces y las cosas no cambian», lamentan. Ante esta situación de disconformidad con las leyes y normas viales «que no garantizan nuestra seguridad», aseguran que no les queda de otra que sacar la moto para «protestar y a hacer ruido».