Borrar

Tú vas tranquila con tus bolsas camino de los contenedores y escuchas, de paso, a un joven que desayuna tranquilamente en una terraza: «La culpa ... de todo la tienen las feminazis», dice con rabia rabiosa. Como eres muy de reciclar y sostenible pero tienes sangre en el cuerpo te vuelves hacia el muchacho un poco descarada. No se queda a la zaga: «Sí, feminazi. ¿Qué pasa?». Medí mis fuerzas y de vuelta del contenedor me conformé con mirarle seriota y un poco retadora. Me rumié para mí misma luego, ya en la distancia, que sin entrar en más palabrotas le podía haber dicho que la culpa de todo es de los 'gymbro' como él (o sea, gym de gimnasio y bro de brother). Igual le hubiera gustado, me temo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco El sheriff