Alerta en Gipuzkoa ante la sucesión de incendios forestales intencionados
El fuego calcina más de treinta hectáreas en una zona de pastos en Aralar y en las laderas del monte Jaizkibel; y en Goizueta se quemaron más de cien
Fue un día complicado para quienes se dedican a combatir los incendios forestales. Aralar, Jaizkibel, Eibar... fueron escenario ayer de otros tantos fuegos, ... al parecer intencionados, que calcinaron más de una treintena de hectáreas. Y en Goizueta se quemaron más de 100. El terreno arrasado solo en suelo guipuzcoano triplica la extensión que se incendió en todo 2018 que fue de 11 hectáreas.
El suceso más grave de todos tuvo lugar en las estribaciones de Aralar, donde efectivos de tres retenes de la Diputación y así como guardas forestales trabajaron en unas condiciones complejas. El incendio quedó extinguido a las 15.30. La columna de humo que se elevaba a sobre el macizo montañoso se divisaba incluso desde la costa.
Las primeras indagaciones llevan a los investigadores a sospechar que el suceso fue consecuencia de una quema ilegal de pastos. Fuentes de la institución foral informaron de que los hechos se iniciaron sobre la una y media de la madrugada, en el monte Zabalegi, entre Amezketa y Bedaio y afectó a una parte de parque natural de Aralar. A esas horas, el centro de coordinación de emergencias recibió una llamada advirtiendo de la existencia del frente. Al lugar acudieron inicialmente dos retenes de la brigada contraincendios de la Diputación además de guardas forales. También se desplazó un técnico de la institución foral. Posteriormente, se sumó una tercera brigada. En total, una treintena de personas trabajaron en las tareas.
El incendio se extendió por una zona de pastos y rocas de pronunciada pendiente, de muy difícil acceso, lo que constituyó todo un obstáculo a la hora de combatir las llamas. Tanto es así que los retenes ni siquiera pudieron trasladar las cisternas cargadas de agua, de forma que al equipo de extinción no les quedó otra opción que combatir las llamas mediante el empleo de palas, batefuegos y otras herramientas.
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El incendio se dividía en dos frentes, uno los cuales, situado entre Balerdi y Aralar, tenía una longitud de un kilómetro, en tanto que el otro era algo inferior. Pese a la aparatosidad, ninguno de ellos puso en riesgo ninguna vivienda ni tampoco explotación agroganadera. «No ha habido riesgo para la población», aseguraron fuentes de la Diputación.
Pasado el mediodía, los frentes quedaron controlados y a las tres y media de la tarde quedaron totalmente extinguidos. No obstante, en la zona se mantuvo una de las cuadrillas en labores de vigilancia ante el riesgo de que el fuego pudiera reavivarse.
Un equipo de investigadores se personó en la zona donde llevaron a cabo las primera diligencias para determinar las causas que desencadenaron el fuego. Según los primeros indicios, todo apunta a que podría haber sido ser intencionado. En este sentido, existen las sospechas de que el autor o autores habrían pretendido una quema ilegal de pastos.
Tres focos en Jaizkibel
En el caso de que esta hipótesis se confirmase al término de la investigación, las actuaciones serán remitidas a la Fiscalía de Medio Ambiente de Gipuzkoa. Las treinta hectáreas equivale al triple de extensión quemada el año pasada. Entonces ardieron 11 hectáreas, las mismas en que en 2017.
Por la tarde se desató otro incendio en Jaizkibel. Este fuego se comenzó a las cuatro y media de la tarde. Uno de los focos se localizó en la zona de las antenas, dentro del término municipal de Pasaia. Al lugar se desplazaron dotaciones de los bomberos de Irun y Zarautz así como guardas forestales y retenes las brigadas forales. La Ertzaintza cerró la carretera GI-3440 en ambos sentidos, entre los puntos kilométricos 5 al 9 para que los servicios de extinción pudieran desenvolver mejor y atacar el fuego. Las labores se vieron dificultadas por un cambio repentino del viento, lo que obligo a enviar mas recursos a la zona. A las ocho de la tarde, el incendio estaba controlado. Las labores se prolongaron hasta entrada la noche y todos los indicios apuntan a que fue asimismo intencionado.
La cifra
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3 focos tenía el incendio que se desató ayer por la tarde en el monte Jaizkibel, lo que lleva a considerar que fue intencionado. Por su parte, el fuego en Aralar tenía dos frentes, uno de ellos de un kilómetro de longitud.
Otro incendio permaneció también activo en terrenos de Eibar, en la zona de Izua. Y en Donostia los bomberos de la capital se mantuvieron vigilantes Igeldo como medida preventiva
En Goizueta, el Servicio de Protección Civil SOS Navarra-112 solicitó al mediodía al Gobierno central el apoyo de un hidroavión para colaborar en la extinción de un fue forestal que quemó más de 100 hectáreas de monte bajo y arbolado. El incendio se declaró también durante la madrugada, en el barrio de Berazkun y tampoco afectó a zonas habitadas, según los datos ofrecidos por el Gobierno foral.
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En la extinción del incendio participaron bomberos del Parque Central con el apoyo de bomberos voluntarios de Goizueta. Al amanecer se incorporaron dos helicópteros antiincendios del Gobierno de Navarra y más tarde se han sumado unidades del parque de Oronoz, así como patrullas de Policía Foral y del Guarderío de Medio Ambiente.
Los fuegos forestales han coincidido con un periodo realmente seco, y elevadas temperaturas. En algunas comarcas de Gipuzkoa se alcanzaron 26º, según mediciones efectuadas por Aemet en su red de estaciones automáticas. No obstante, la situación tiende a cambiar. Ayer ya se produjo una rolada de viento en Punta Galea que dio lugar a un descenso de la temperatura de siete grados y medio, de 25 a 18,5º. Para mañana se prevé la llegada de un pequeño frente frío cuyo extremo podría dejar alguna precipitación. Y para el lunes se anuncia un cambio todavía más brusco que dará lugar a un notable descenso de las temperaturas e incluso podía nevar por encima de 1.000 metros.
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