Gipuzkoa acelera y tratará su basura desde el día 26 en el complejo de Zubieta
Si se cumplen los plazos, el territorio no tendrá que enviar residuos a Bizkaia en todo 2019, lo que supondrá un ahorro de cerca de 900.000 euros
Los primeros camiones cargados de residuos de distintas comarcas de Gipuzkoa comenzarán a descargar en el complejo medioambiental de Zubieta el próximo día ... 26. Esa es la fecha elegida para que comience a funcionar la planta de tratamiento mecánico-biológico (TMB) que, en principio, será refrendada en una asamblea extraordinaria de GHK el martes de la semana que viene.
Aunque desde hace ya unos meses se barruntaba que la instalación comenzaría a tratar las primeras toneladas de basura para el mes de abril, la falta de concreción en las últimas semanas hacía presagiar un ligero retraso en la apertura de la TMB. Sin embargo, desde la dirección de GHK se quieren acortar los plazos y aprovechar cuanto antes los beneficios técnicos y económicos que conlleva la puesta en marcha de la planta de tratamiento de la fracción resto. Por ello, a propuesta del presidente del consorcio, el socialista José Ignacio Asensio, se debatirá en asamblea ese acelerón en la entrada en funcionamiento de la TMB, que traería un ahorro cercano a los 900.000 euros para las arcas forales, una vez desaparezca la necesidad de enviar parte de esos residuos a Bizkaia.
Según el informe de viabilidad económica de la puesta en marcha de la TMB al que ha tenido acceso este medio, el objetivo es permitir la entrada de los camiones con residuos a Zubieta a partir del día 26 de este mes. A partir de entonces se iniciará el periodo de pruebas de la TMB, que se prolongará durante dos meses. Desde el 3 de julio la operatividad de la misma sería completa, de forma que durante los seis últimos meses del año todos los vertidos del contenedor gris de Gipuzkoa serán tratados antes de ser depositados en el vertedero de Mutiloa -hasta que entre en marcha la planta de valorización (incineradora) que todavía no tiene una fecha de arranque concreta-. Esto es, unas 75.000 toneladas de residuos (se calcula que se generarán 150.000 toneladas de rechazo este año), podrán pasar por esa primera fase de tratado.
Desde la puesta en marcha de la planta TMB de Zubieta, el residuo guipuzcoano dejará de ser 'crudo'. La fracción resto será depositada por los camiones en un enorme depósito de 40 metros de alto, 60 de largo y 20 de ancho donde se pueden acumular hasta 4.000 toneladas de material, esto es, unos cinco o seis días de generación ininterrumpida de basura. De ahí el residuo pasará al proceso de tratamiento mecánico, que se encarga de separar materiales que se pueden reciclar, como plásticos, vidrios, metales... Un cribado que permitirá recuperar hasta el 8% del material reciclable.
Se desea alcanzar el 100% del rendimiento el 3 de julio, tres meses antes que lo inicialmente previsto
La vida útil del vertedero de Mutiloa concluye en septiembre, pero la TMB la estirará unos meses más
Este proceso de volcado y cribado durará unos tres días y se disponen de dos líneas para tratar el material y atender posibles picos de generación de desperdicios. Se trabajará a un solo turno.
Después de retirar todo el material reciclable, la basura se dispondrá para su tratamiento biológico en una especie de playa inmensa dentro de la nave, donde mediante un intenso contacto con el aire se realizará el biosecado. Un proceso para el que se necesitan entre 15 y 20 días y permite reducir un 25% el peso de los residuos.
De ahí que entre ambos tratamientos, una tonelada de lo que hasta ahora es residuo 'crudo', se convertirá en unos 700 kilos de desperdicios tratados que deberían gestionarse como hasta ahora ya que la valorización de esos residuos no se espera hasta 2020. Gipuzkoa tiene a día de hoy la opción de enviar ese residuo del contenedor gris directamente al vertedero de Mutiloa o a la incineradora de Bizkaia.
Las claves
-
38.750 toneladas de residuos más se calcula que pueda tratar la TMB este año si se adelanta tres meses su entrada en funcionamiento al 100%.
-
83.000 kilómetros en camión menos estima el informe que se deberán realizar para enviar gestionar los residuos en caso de iniciar ya la actividad.
-
Coste sin TMB
-
A Bizkaia Se enviarían un mínimo de 25.000 toneladas de residuo 'crudo' a Zabalgarbi.
-
Presupuesto 3.382.500 euros para el propio vertido y 404.500 euros su transporte.
-
Ubicación A 100 kilómetros del punto de mayor generación de residuos.
-
Con la TMB activa
-
A Mutiloa El coste sustitutivo asciende a 913.646 euros
-
Encendido Los pagos por disponibilidad y por tonelada tratada en Zubieta ascenderían a 1.983.893 euros.
-
Ubicación A 50 kilómetros del punto de mayor generación de residuos.
La primera opción tiene una capacidad limitada. Según GHK, un máximo de 117.600 toneladas para todo este ejercicio. Con lo que su capacidad para septiembre de este curso estaría agotada. Y por otro lado, el convenio firmado con la Diputación de Bizkaia permite a Gipuzkoa enviar entre 25.000 y 60.000 toneladas de residuo al territorio vecino. En principio, la combinación de ambas vías solucionaría el entuerto este año, pero desde la presidencia de GHK se quiere acelerar la entrada en funcionamiento de la TMB para que el territorio al final no tenga que echar mano de la exportación de residuos a Bizkaia y se gane este año la batalla de la autosuficiencia en la gestión de residuos y el ahorro de la partida destinada a ese transporte de desperdicios hasta Zabalgarbi.
Alargar la utilidad de Mutiloa
Según señala el informe que se presentará en la asamblea, con la puesta en operación anticipada en 3-4 meses de la TMB se tratará de reducir el coste del transporte al vertedero de Mutiloa en un 30%, se alargará la vida útil de dicha instalación y se evitará el coste del vertido y la contaminación ambiental de tener que ir a verter a Bizkaia. Todo ello, reportaría a GHK un ahorro de 889.761 euros.
El coste total previsto por necesitar el vertido mínimo en Bizkaia, esto es, 25.000 toneladas, asciende a 3.787.000 euros. El informe considera que el adelanto en tres meses de la puesta en marcha de la planta (el acuerdo preveía que operase a máximo rendimiento a partir del 3 de octubre), permitirá tratar 38.750 toneladas más de residuos, los cuales reducirían su tamaño un 30% tras pasar por la TMB. Por tanto, los residuos tratados se podrían enviar a Mutiloa en vez de a Bizkaia y el coste de ese envío sería de 913.646 euros.
A ese casi millón de euros de coste del envío de residuos a Mutiloa habría que sumarle el gasto que supondría el adelanto en tres meses de la puesta en marcha de la TMB. La suma del coste fijo por pago por disponibilidad, y el variable -pago por tonelada- ascendería hasta los 1.983.893 euros. El nuevo coste del tratamiento de residuos con el adelanto de la puesta en funcionamiento de TMB ascendería a casi 2,9 millones de euros, por lo que el ahorro en comparación con el envío a Bizkaia de las 25.000 toneladas previstas ascendería hasta los 889.761 euros.
En el presupuesto de GHK para este 2019 ya está recogida la partida correspondiente al envío de residuos a Bizkaia, por lo que la propuesta del presidente entiende que existe disponibilidad para la puesta en marcha anticipada de la TMB. Desde el consorcio se avanza que la modificación o cancelación del convenio firmado con Bizkaia se realizará a finales de año tras comprobar si el efecto del adelanto de la actividad en la planta es el esperado.
Más información
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión