Las fuertes rachas de viento obligan a desviar a Bilbao un vuelo que debía aterrizar en San Sebastián

El impacto de la borrasca Aline en Gipuzkoa está causando estragos en tierra, y también en el aire. Las fuertes rachas de viento, de hasta 100 km/hora en algunos puntos del territorio, han obligado a desviar al Aeropuerto de Loiu un vuelo que unía Sevilla y San Sebastián este viernes. La aeronave, un Airbus A319 de la compañía Volotea, ha despegado desde la capital andaluza a las 17.15 horas y debía aterrizar, según su plan de vuelo, en Hondarribia a las 18.50 horas. El aeropuerto de Hondarribia informa que se están registrando rachas de 80 kilómetros/hora.

No es la primera vez que una aeronave que debía aterrizar en el aeródromo de Hondarribia desvía su plan de vuelo por las inclemencias del tiempo. De hecho, los controladores del aeropuerto de San Sebastián están acostumbrados a buscar nuevos puntos de aterrizaje cercanos por los vientos cruzados y la baja visibilidad, dos factores meterológicos comunes del aeródromo guipuzcoano, tal y como explicó Álvaro Minondo, controlador aéreo en el Aeropuerto de San Sebastián, a este periódico.

A pesar de las alertas por viento y oleaje, no se han registrado más incidencias debido al temporal. El cierre de parques y de paseos que discurren junto al mar en Donostia ha evitado que se produzcan daños, si bien las olas han salpicado zonas como el Paseo Nuevo, donde más de uno ha acabado empapado. El aviso por viento, por otra parte, se ha desactivado a las 18.00 horas de este viernes.

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