Me gusta el picante. Disfruto de unas patatas bravas, de un wasabi o de un 'sambal'. De hecho, recuerdo muy bien cierta ocasión en que ... entré en un restaurante indonesio, en Australia, concretamente en las 'Montañas Azules', cerca de Sidney, y me pusieron 'sambal'. Picaba, picaba mucho, ... pero con una o dos cervezas se podía tragar. Y quien dice dos, dice tres o cuatro.
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El componente activo de las guindillas es la capsaicina. A veces, cuando me duelen las manos, me doy una crema que contiene dicha sustancia pues es analgésica.
Las células solares normalmente están hechas de silicio, lo que resulta bastante caro. Su rendimiento –de la energía que recibe del sol, la proporción que se convierte en electricidad– está en torno a un 20%. Hay una nueva tecnología en la que el silicio se sustituye por un mineral abundante y barato llamado perovskita, que promete células muchísimo más finas, de menos peso, flexibles y a un precio más económico, lo que aumenta sus posibles usos. Hoy por hoy tiene problemas de estabilidad, duran poco tiempo, pero, paso a paso, se va logrando alargar su periodo de vida útil.
El 13 de enero, la revista 'Joule', publicaba un trabajo cuyo autor principal es Shaobing Xiong, donde se informaba de que si a la perovskita le añadimos el picante de las guindillas su rendimiento aumenta en casi un 15%, se pasa del 20% al 23%. Además, al añadir el picante hace que aumente su duración.
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