Aintzane Oiarbide: «El fallo del TSJPV ha dolido, pero el peaje de la N-I no va a desaparecer»

– ¿Duele el fallo del TSJPV y la afirmación de que esta segunda norma solo ha sido un «retoque» de la primera norma anulada?

– Claro que duele. Llama la atención sobre todo leyendo la sentencia que no se haga ninguna mención a todos los datos que hemos aportado ni al visto bueno de Europa. No se hace mención a nada. A todo el mundo le llama la atención. Por otra parte, nos preguntamos por qué la Comisión Europea (CE) da por bueno el planteamiento y, sin embargo, esta sala por segunda vez dice que sigue habiendo una discriminación hacia el transportista foráneo. Yo no sé si tienen conceptos diferentes sobre lo que es la discriminación, pero la legislación europea, las directivas, las ejecuta la CE. Es un poco extraño todo esto. Pero quiero dejar clara una cosa. Los peajes en las carreteras de alta capacidad y concretamente este en la N-I es estratégico para Gipuzkoa. Es una decisión de Juntas Generales y es estratégico.

– Y eso significa que...

– Eso significa que no va a desaparecer. El peaje ha venido para quedarse. No puede desaparecer. Veremos qué podemos hacer, cómo se le puede dar la vuelta a esto. Nosotros tenemos esperanzas en que el Tribunal Supremo lea minuciosamente todos los datos nuevos que hemos aportado. Y el propio Supremo también puede elevar una cuestión prejudicial al Tribunal Europeo. Es una posibilidad que está ahí.

– ¿Confían por tanto todavía en que la vía judicial dé la razón a la Diputación de Gipuzkoa?

– Sí. Llama la atención que la CE dé por buena la aplicación de la directiva europea en el peaje de Gipuzkoa y después un tribunal de Euskadi diga que no lo ve así sin ni siquiera hacer referencia a lo que dice la Comisión.

– Desde Fenadismer afirman aun así que la autorización de la Comisión a este peaje no entraba en el fondo de la discriminación y que solo daba luz verde a las tarifas que se debían aplicar a cada tramo. ¿Esto es así, o el sector también está equivocado?

– Según la directiva europea, lo que tiene que analizar la CE es el planteamiento que se les presenta y después deben validar las tarifas. Es cierto que no hacen ninguna mención sobre si es discriminatorio o no, pero es evidente que siempre que hemos estado con ellos nos han trasladado que no lo ven como discriminatorio. La propia Comisión Europea habría actuado si hubiese visto alguna posible discriminación, teniendo en cuenta además que conocen la primera sentencia. Por tanto, es evidente que la CE no ve rastro de discriminación en este planteamiento.

– ¿No hay intención de suspender el cobro del peaje hasta que el Tribunal Supremo se pronuncie tanto sobre la primera norma foral como sobre esta segunda?

– No. Tenemos que seguir cobrando el peaje. Es una norma foral que está en vigor y no podemos dejar de cobrar. Es lo que han mandado las Juntas Generales, lo que está aprobado y no podemos dejar de hacerlo. No vamos a seguir cobrando porque a nosotros nos dé la gana, es que la norma sigue en vigor.

– ¿Y no sería posible que dado que el Superior se ha pronunciado en contra de la norma, se lleve esa nueva situación a pleno y sean las propias Juntas las que decidan si suspender o no dicha norma y el cobro del canon a camiones hasta que la situación se aclare?

– Creo que no es momento de hacer esos futuribles.

– Pero la oposición ya ha denunciado que la situación es grave y que convendría suspender el cobro.

– Las Juntas Generales pueden tomar la decisión que quieran. De momento, la decisión que han tomado es que esta cuestión es estratégica para la financiación de carreteras y han aprobado esta norma foral. Y hay que seguir cobrando porque la norma está en vigor. Nos tenemos que ceñir a eso.

– ¿Se descarta entonces llevar a pleno la cuestión y que los partidos decidan si hay que suspender el cobro?

– Los que lleven esta propuesta a las Juntas deberán tener una mayoría también para sacarla adelante. Las cuestiones se aprueban por mayoría y cada grupo juntero es libre de proponer lo que quiera.

– ¿La posible devolución de las cuantías a los transportistas entra dentro de los futuribles que maneja la Diputación?

– Sí. Nosotros esas cuestiones las tenemos estudiadas. Pero insisto, el peaje va a seguir, de una manera u otra.

– Señaló hace un año que la cuantía recaudada con los peajes de la N-I de la primera norma anulada estaba guardada por si se daba el caso de que el Supremo fallase que había que realizar esa devolución.

– No. Evidentemente hay una cuenta de reserva donde se va ahorrando cierto dinero, pero sobre todo utilizamos la recaudación para el mantenimiento de la carretera. Hay otro porcentaje para obras de mejora u otras cuestiones. Por ejemplo, el enlace de Andoain. En el consejo de administración de Bidegi hemos aprobado la licitación de la redacción de ese proyecto. En Andoain, en la confluencia de la N-I y la A-15 tenemos un problema muy grande. En ese punto a diario pasan 60.000 tránsitos. Es imposible que la Diputación haga frente a una obra así, que rondará los 40 millones de euros. Desde su presupuesto no puede hacerle frente y ahí entra el sistema AT de pago por uso. La obra la va a hacer Bidegi con la recaudación del sistema AT de la N-I. Este sistema de pago por uso es la única forma viable de poder realizar mejoras en la red de carreteras y tener un mantenimiento para ofrecer una seguridad vial suficiente a los usuarios. ¿Qué vamos a hacer de lo contrario? ¿Quitar gasto de políticas sociales para el mantenimiento de las carreteras? Creo que no.

– ¿Y de dónde se quitaría en el caso de que la sentencia del Tribunal Supremo obligue a devolver las cuantías a los transportistas?

– El sistema AT ya tiene resortes suficientes para hacer frente a esa situación. Pero habrá que ver lo que dice la legislación, si hay que devolver o no y cómo hacerlo.

– ¿Se va a optar por diseñar una tercera norma para regular el peaje en esta ocasión o se esperará al Supremo?

– Lo primero que vamos a hacer es hablar con la comisaria de Transportes de la CE. Vamos a plantear la problemática para estudiar qué salida tenemos o si deben realizar una aclaración ellos. Analizaremos todas las opciones que tenemos. No descartamos nada pero todavía no tenemos ninguna decisión tomada.

– Los transportistas creen que en todo caso el peaje debería gravar el paso tanto de vehículos pesados como de ligeros. ¿Esa sería otra opción para la N-I?

– En todas las autovías de nueva construcción entran dentro del peaje todos los vehículos. En el caso de la N-I queda claro que de momento solo será para camiones y en caso de que se hagan actuaciones muy importantes como renovar toda la red de la N-I, entonces se podría pensar en los vehículos ligeros. Esto no lo veo probable en muchos años.

– ¿Se ha puesto en contacto el Gobierno de Navarra para conocer los detalles sobre el diseño de los pórticos de la N-I una vez parece que su intención es el de gravar el paso de camiones por cinco de sus carreteras de mayor afluencia?

– Navarra no ha llamado. Otras administraciones sí que se han interesado por el proceso, pero Navarra, no. Es verdad que la intención de Navarra es implantar peajes para lo mismo, porque no pueden afrontar todos los gastos de mantenimiento con los presupuestos que tienen. Esta problemática es general en todo el Estado. No hay un sistema viable en todo el Estado que no sea implantar peajes. Por eso hay un interés por parte de distintos territorios en conocer el sistema de Gipuzkoa, ya que hemos sido los primeros en implementar la directiva europea, pero esto va a llegar a todas partes. Así lo hacen otros países europeos.

– ¿Se van a resentir algunas inversiones del Departamento de Infraestructuras este año a causa del Covid-19?

– Para nosotros lo nuclear es la seguridad vial y el mantenimiento de carreteras. Va a haber más afección desde el punto de vista del retraso de adjudicaciones y licitaciones, ya que los plazos han quedado suspendidos y algunos proyectos se han tenido que retrasar. Por ejemplo, las obras del túnel de Belabieta, que empezarán el año que viene. El resto, firmes, taludes... seguiremos con todo ello sin restricciones. Y también hemos retrasado alguna obra como la del Polígono 27 que por responsabilidad y teniendo en cuenta la situación generada, debemos aplazar.