La UE frena la competencia de los camioneros del Este, que arrasa con los guipuzcoanos

Además, existe una segunda vía de penetración, las conocidas como empresas 'buzón', es decir, compañías españolas, entre ellas también guipuzcoanas, con sede 'ficticia' en un país del Este, pero que operan en el Estado. Por estas dos vías arrasan con las empresas locales, causando a su vez un impacto negativo en las arcas de Hacienda y en la Seguridad Social.

Estas prácticas de competencia desleal tienen fecha de caducidad. El Parlamento Europeo aprobó el mes pasado el conocido como 'Paquete de Movilidad', cuyo objetivo es poner orden en el sector. Han sido necesarios tres años para superar todos los trámites legislativos, aunque habrá que esperar a superar los periodos transitorios que se han establecido para cada una de las normas modificadas.

La nueva legislación establece una serie de controles para impedir el funcionamiento de las citadas empresas 'buzón'. Así, todas las compañías estarán obligadas a acreditar su actividad real en el país donde radica su sede. Por esa razón, los camiones regresarán cada ocho semanas al país de matriculación, mientras que los conductores lo harán cada tres o cuatro semanas.

De esta forma se quiere evitar que, por ejemplo, una empresa de transporte española abra una sede 'virtual' en Bulgaria, matriculando allí los camiones -conducidos por chóferes búlgaros- cuando sus servicios los presta en el Estado de forma permanente. El negocio es redondo, porque trabajan en España con costes de Bulgaria.

Ahora bien, la competencia desleal también la realizan empresas de los países del Este que desplazan sus camiones a España. En estos casos, la norma aprobada ataca estas prácticas fijando que los conductores que realicen transporte internacional cobren, al menos, el salario mínimo establecido en el país en el que realizan el porte.

La Federación de Asociaciones de Transporte de España valora positivamente el acuerdo del Parlamento europeo. «Las exigencias aprobadas -señala Fenadismer- suponen un duro golpe a la deslocalización, a las empresas 'buzón' y a la desigual competencia ejercida por las flotas de los países del Este». La asociación denuncia que esas empresas se han ido haciendo con el mercado del transporte internacional «en todos los países europeos gracias a sus ventajas competitivas, debido a sus menores costes sociales, fiscales y laborales».

El Ministerio de Fomento realizó un estudio en 2017 en el que constata que el 14% de las importaciones españolas las realizan camiones de países del Este, con un especial incremento en la actividad de los rumanos. En cuando a las exportaciones, esas flotas controlan el 11% de las mercancías que salen al exterior.

Este crecimiento desmesurado no solo se produce en el transporte internacional, sino que cada vez es más frecuente la presencia en el mercado interior donde, por ejemplo, la presencia de flotas domiciliadas en Bulgaria ha aumentado un 340%.

La normativa europea también pone coto a determinadas prácticas de abuso laboral. En la actualidad, por ejemplo, los camioneros desplazados desde otro país a España solo pueden realizar tres transportes como máximo en siete días. La novedad radica en que al cabo de ese plazo deberán transcurrir cuatro días antes de reanudar su labor. Otra medida es la implantación obligatoria del tacógrafo inteligente que recoge el paso por las fronteras.

Dentro del ámbito laboral, se prohíbe expresamente el descanso semanal -al menos 45 horas consecutivas- en la cabina del camión. Si se tiene que realizar fuera del domicilio del conductor, la empresa debe correr con los gastos de alojamiento.

Fenadismer señala que con estas medidas «se acaba con la práctica deshumana de flotas de transporte internacional que mantienen a sus conductores permanentemente desplazados».

El Paquete de Movilidad también quiere acabar con la desregularización del transporte ligero, básicamente furgonetas, sobre todo en servicios internacionales. Este tipo de vehículos está registrando en estas rutas un incremento significativo, ya que les permite sortear las exigencias del tacógrafo, el control de tiempos de conducción, así como las licencias comunitarias.

La nueva legislación establece, como cambio más significativo, la exigencia del cumplimiento de los requisitos señalados anteriormente a todos los vehículos de más de 2,5 toneladas de peso máximo autorizado.