Euskadi apoya a los ganaderos de leche con ayudas directas de 75 euros por vaca

Euskadi lanzará también su propio paquete de ayudas para el sector lácteo. Tras los planteamientos conocidos de la Unión Europea y el Ministerio de Agricultura, el Gobierno Vasco confirmó tras la comisión con los representantes del sector celebrada ayer, que implementará una serie de ayudas -directas e indirectas- para paliar las consecuencias del fin de las cuotas lácteas e impulsar la modernización, estructuración y diversificación del sector.

Como punto de partida, el viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria, Bittor Oroz, anunció la puesta en marcha de una línea de ayuda directa 'de minimis' -que no hace falta comunicar a la Comisión Europea- de 75 euros por vaca en cada explotación que se acoja con un máximo de 7.500 euros por producción con el fin de «ayudar a la competitividad y la eficiencia» de las mismas. Este año, serán las diputaciones de Gipuzkoa y Bizkaia las que destinarán esas ayudas a sus explotaciones y el próximo año lo harán Álava y el propio Ejecutivo vasco.

En la actualidad alrededor de 436 explotaciones comercializan leche de vaca en Euskadi, de forma que un cálculo aproximado podría elevar la cifra destinada a estas ayudas por encima de los dos millones de euros.

Dichas cuantías se sumarían a las aprobadas ya por el Estado, aunque desde la organización agraria ENBA señalan que solo 18 explotaciones en Euskadi se pueden acoger a las ayudas estatales. Y es que la buena estructuración del sector en cooperativas como Kaiku o Karranza, ha hecho que desde la desaparición de la cuota láctea, solo 18 explotaciones hayan tenido que vender leche por un precio medio inferior a los 0,27 euros el litro, tope máximo para poder recurrir a las ayudas de Agricultura.

Pero el plan del Gobierno Vasco no concluye ahí, ya que los primeros compradores (cooperativas) podrán acogerse a ayudas por valor de 250.000 euros en los próximos tres años si mejoran los sistemas de recogida de leche en las explotaciones. Además, el Ejecutivo trata de diversificar el mercado ya que el 97% de las ventas son leche líquida. Así, sufragará un 40% de los proyectos para producir otros derivados y sacará el sello de Eusko Label para el queso de vaca.