Victoria tan apurada como merecida

Cuando Altuna III y Ander Imaz equilibraron el inquietante para ellos 16-20 gracias a tres errores consecutivos de Peio Etxeberria, incluida una falta de saque, y merced a un buen derechazo atrás del delantero amezketarra, la inercia positiva que traían los segundos clasificados del Masters CaixaBank, basada en cuatro victorias consecutivas, invitaba a creer que serían capaces de llegar a 22 antes que sus rivales. El sustituto del lesionado Jaka y su zaguero, Albisu, veían peligrar un partido que jugaron mejor y que parecía bajo su control en el 16-20 este domingo en Elgoibar.

El desenlace pudo ser otro porque con 20-20 en el electrónico Altuna III y Ander Imaz tuvieron el tanto hecho. Dominaron. Les faltó un remate certero o uno de esos pelotazos atrás sin respuesta posible. Después de defender con uñas y dientes, los azules tomaron el mando y definió Albisu con un derechazo próximo al rebote. La botivolea defensiva de Imaz voló por encima de la chapa alta del frontis. El propio zaguero ataundarra cerró el encuentro con otro zambombazo arrimado al ocho: 20-22.

Fue una victoria tan apurada como merecida que vale el quinto punto a Peio Etxeberria y Albisu, reenganchados a la clasificación. Suceda lo que suceda esta tarde en la segunda visita del Masters al frontón de la Ikastola, terminarán la décima jornada a un triunfo de la cuarta plaza, última que da acceso a las semifinales. Y ojo a otro dato: superan en el average particular a sus rivales de ayer, de quienes les separan dos puntos. También les ganaron en la primera vuelta.

Peio Etxeberria y Albisu han comenzado con buen pie esta aventura cuya duración dependerá de la fecha de regreso de Jaka, a quien los médicos han diagnosticado una convalecencia de tres semanas por la rotura de fibras en el gemelo interno de su pierna derecha. La primera experiencia juntos del explosivo delantero de Zenotz y el zaguero de Ataun, no ya en este torneo sino a lo largo de su carrera, terminó en triunfo.

Sumaron. Peio Etxeberria aparcó en las calles de Elgoibar el cartel de pelotari irregular para cuajar una actuación seria. Apenas se inmiscuyó en las tareas de dominio de Albisu, a quien dejó hacer a bote. Defendió con empaque los intentos de Altuna III para buscarle las cosquillas. Se enredaron en contadas ocasiones. Y falló poco. De hecho, solo llevaba perdido un tanto en el 16-20. Tres errores suyos seguidos dieron vida a los colorados. Sin embargo, mantuvo la calma en los dos últimos tantos, justo cuando la presión apretaba más. Y eso habla bien de este pelotari de 21 años inmerso en su estreno al máximo nivel en el juego de parejas.

Albisu dejó sin restar dos saques y se le fueron cuatro fuera de los límites reglamentarios en el peloteo. Falló pelota, y eso le baja la nota. Ahora bien, mandó con autoridad en el peloteo, encontró la pared izquierda para molestar a Ander Imaz y resultó decisivo en los momentos calientes, en el desenlace.

Aunque rozaron su octavo triunfo, Altuna III y Ander Imaz no tuvieron su mejor tarde. Estuvo espeso el delantero. Sin chispa en la derecha, careció esta vez de la capacidad de sacar de su sitio a los contrarios. Tampoco dibujó jugadas con la zurda, excepción hecha de la dejada al txoko del 10-11 y del gancho del 11-12. Le faltó alegría. Él mismo se exige más de lo que demostró.

Y eso que el frontón de Elgoibar, de solo ocho cuadros y aproximadamente 30 metros, con la pasa en el seis y material «viejo y gastado ya en otros partidos» en palabras del intendente Jon Apezetxea, parecía apropiado para sus condiciones y su habilidad. La cancha presenta otra característica peculiar. La pelota corre bastante a partir del seis pero se para mucho en los cuatro primeros cuadros.

Tampoco Ander Imaz, tan luchador como siempre, encontró demasiadas oportunidades para castigar atrás y forzar devoluciones que facilitaran los remates de su delantero. Tuvo pocas y no las aprovechó tan bien como acostumbra.