Adrián Otaegui vuela entre los alcornoques de Valderrama

El donostiarra, de 29 años, se ha hecho con el preciado trofeo con 19 golpes bajo par, el registro jamás firmado en un campo que para muchos golfistas es como la visita anual al dentista. Otaegui ha volado entre sus alcornoques. Ha dominado de principio a fin con una superioridad que asusta para corroborar que está en el buen camino.

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Otaegui gana y cumple con su peculiar promesa

Es el cuarto título del golfista del club Goiburu de Andoain –antes ganó el Paul Lawrie en Griesbach (2017), Knockout en Antwerp (2019) y Abierto de Escocia (2020). Pero ganar en Valderrama es otra cosa, son palabras mayores. Supone situarse en otro escalafón. A Otaegui prácticamente le sobró la última vuelta porque se presentó ayer en el tee del uno con seis golpes de renta sobre Min Woo Lee y Lagergren y no permitió ninguna opción a sus rivales. Cerró cualquier resquicio en los nueve primeros hoyos cuando hizo tres birdies y seis pares. Sus cuatro vueltas han sido para guardar: 67 (-4), 66 (-5), 64 (-7) y 68 (-3). Una exhibición que acabó de la mejor forma posible, con un birdie tras un putt de seis metros ante un público entregado en un campo en el que han triunfado grandes como Tiger Woods, Colin Montgomerie, Bernhard Langer, Nick Faldo, Lee Westwood o Sergio García. «El apoyo del público ha sido increíble. Ganar en casa y en este campo es la mejor sensación que he tenido», confesaba ayer al finalizar. «Es mi campo favorito, está siempre en mi calendario y me alegro de haberlo podido jugar tan bien en esta ocasión», añadió.

Con esta victoria Otaegui se asegura su presencia en la final de Dubái, tiene muy cerca la tarjeta del PGA Tour para el año que viene y es factible que pueda entrar en el equipo europeo de la Ryder Cup de 2023 gracias el rendimiento que viene ofreciendo.

El triunfo del donostiarra se une a las recientes victorias de Jon Rahm en el reciente Open de España y la lograda por Eugenio López Chacarra en la liga saudí.