Una instalación acorde a los tiempos

Además, se reubicarán los concursos, incluida la jaula de lanzamientos, que cambiará de sentido para posibilitar la celebración de forma simultánea en dos pistas para competiciones de alto nivel. También se incorporarán dos nuevas zonas destinadas a calentamientos. Una en la zona de la grada de 55 metros de longitud y 3,5 de ancho y otra, cubierta con forma de recta, de 45 metros de longitud y 1,80 de ancho.

Se trata de un proyecto ambicioso para la Federación Atlética Guipuzcoana. «Actualmente disponemos de un gimnasio con máquinas muy antiguas. Las colchonetas de pértiga tienen muchos años. Es cierto que el aforo del Miniestadio puede aumentar, pero eso no influye en el nivel de nuestros entrenamientos», expresa Ramón Goikoetxea, presidente de la FAG.

Entre otros cambios realizados, gracias a la renovación de la jaula de lanzamiento el Miniestadio ha logrado estar homologado por la Federación Española. «El establecimiento está dotado para albergar cualquier competición de las que habitualmente se celebran aquí. Con todo listo, sólo nos falta ser capaces de volver a los orígenes y recobrar mayor importancia entre los deportes punteros del multideporte», defiende. Goikoetxea, que lleva cuatro años al frente de la Federación Atlética Guipuzcoana.

En cuanto al campo de rugby, además de pasar a tener unas dimensiones de 109x68 metros, se realizará la reparación del murete, la valla perimetral y las barandillas. También se sustituirá el sistema de riego, la centralita y los cañones exteriores actuales por unos aspersores interiores. El broche final será el nuevo canal de recogida de drenaje en sectores semicirculares.

José Mari Isasa, entrenador del equipo sénior del Bera Bera de rugby, ha tenido que 'emigrar' esta temporada a Puio para poder entrenar y jugar durante las obras de plantado del nuevo césped. «Para nosotros es esencial que el campo del Miniestadio de Anoeta esté bien. Hemos pasado casi dos años sin poder entrenar ahí por no arreglarlo», explica.

Esta remodelación no sólo pondrá fin al «tóxico y mal olor que desprendía el campo», sino que será clave para la progresión del equipo. «Cuando los partidos están muy peleados, el factor campo es determinante», dice.