¿Era Iturralde el problema?

Entiendo la decisión adoptada por el consejo. La sombra de la Tercera División crece por momentos y tiene que ser muy complicado asistir a ese proceso impasible, sin tomar cartas en el asunto. Es de perogrullo, pero sólo los que están en la toma de decisiones pueden acertar o equivocarse. Es fácil hablar estando fuera.

Esa reflexión no quita para valorar el meritorio trabajo de Iturralde, que ha desarrollado su labor en un contexto que no ha sido nada fácil. En la mente queda el flojo partido de los irundarras ante el Amorebieta, pero el suyo no se trataba de un equipo muerto. Para muestra, los botones de las jornadas previas.

El estilo del de Astigarraga podría gustar más o menos, pero creo que muchos de ustedes coincidirán en señalar que el problema de este club no es de un técnico u otro. No es cuestión de Santana, Ribera, Domínguez o Iturralde. Lo saben aquí, los cerca de 800 valientes que acuden a Gal, y en la China Popular, que diría aquel. El problema es estructural, de falta de plan.

En la víspera del choque ante el Valladolid B, Gorka Etxeberria, preguntado por la posibilidad de ocupar el banquillo del Unión, respondió que sería «un error garrafal» abandonar el puesto para el que fue contratado, el de director de fútbol. El donostiarra tiene en mente un proyecto para el club, que ya es algo más de lo que ha habido en el pasado reciente. «Lo que estamos preparando es demasiado importante para el Real Unión después de los últimos diez años», deslizó. Ojalá pueda ponerlo en marcha en Segunda B. Tiempo hay más que de sobra para revertir la situación.