Los lienzos de Sert superan su particular ITV

Para evitar que se vuelva a producir un deterioro en las pinturas, cada cuatro años se realiza una campaña de conservación preventiva. La primera fue en 2017 y ahora se ha acometido la segunda. En esta ocasión ha contado con una diferencia: dentro de las actividades del décimo aniversario se han recuperado durante dos semanas esas visitas guiadas para los socios del museo, que hace una década tuvieron una gran aceptación.

Ana Santo Domingo, restauradora de San Telmo, conoce palmo a palmo la magna obra que Sert. Explica que «a pesar de todos los esfuerzos que hagamos, el proceso de envejecimiento continúa ya que tenemos que tener en cuenta que es absolutamente imposible eliminar los agentes de degradación que le afectan y mucho menos en unos muros del siglo XVI y con la técnica tan particular empleada para colocarlos». Pintó en su estudio los lienzos de hasta 11 metros de alto, los enrolló y los trajo a Donostia para pegarlos en la pared, muy cómodo para el artista y el arquitecto de la obra, pero un verdadero quebradero de cabeza para los responsables de su conservación.

Esos dos aspectos son los que condicionan la obra. Por un lado las paredes y la cubierta de la iglesia han retenido agua desde su inauguración. El proyecto arquitectónico de rehabilitación permitió subsanar ese problema, aunque ha sido necesario que pase casi una década para que se asentara totalmente. Además, como se sigue utilizando para distintos eventos, cuando hay un número elevado de personas se produce un efecto de condensación que se deposita en las pinturas.

Para dar continuidad a los objetivos de la restauración y que la inversión de casi 200.000 euros perdure en el tiempo se puso en marcha un programa de conservación preventiva con un control periódico de la evolución de los lienzos, interviniendo de forma puntual en los nuevos deterioros. El coste de esta operación es de unos 14.000 euros que en esta ocasión han sido financiados con parte de la indemnización que el museo recibió por los daños causados en el lienzo central, 'El altar de la raza', en la noche del 21 de enero del año pasado por el disparo accidental de la escopeta de un ertzaina. El arma estaba guardada en una bolsa y se había activado cuando el agente, que había participado en un dispositivo especial de seguridad desplegado con motivo de la festividad de San Sebastián, se retiraba junto al resto de sus compañeros de la iglesia. El tiro se produjo en el momento en que el ertzaina se colocó la bolsa al hombro.

La cuantía de la indemnización, a cargo del Departamento vasco de Seguridad, fue de 25.780 euros. El coste de la restauración fue de 5.780 euros a los que hay que sumar otros 20.000 en los que se cuantificó la depreciación del lienzo dañado, que está valorado en un millón de euros.

Localizar donde recibió el lienzo el disparo se ha convertido en uno de los retos de los visitantes de la iglesia y en una de las preguntas habituales que se han realizado durante las visitas guiadas. Una pista, está cerca de la cabeza de San Telmo, que preside el lienzo principal. Si se observa desde el centro es difícil detectarlo, pero a medida que se avanza hacia los laterales se puede ver. Los restauradores no pueden utilizar los mismos materiales que los que empleaban los artistas en su creación, porque eran mezclas propias que realizaban según la obra, y la integración cromática la han tenido que realizar con acuarela, con la consiguiente complicación para conseguir el brillo metálico que no se consigue desde todos los lados.

Las campañas de conservación son complicadas debido al tamaño de los lienzos. Son necesarias dos tipos de plataforma elevadora, que en ambos casos deben ser eléctricas porque no se puede utilizar gasoil dentro del recinto para que la combustión no dañe las obras. Con la más sencilla, una de tijera de 12 metros se accede a toda la superficie de la obra de Sert, salvo el altar, que está sobre elevado, donde se utiliza una plataforma articulada autopropulsada de 17 metros muy ligera para evitar que el peso hunda las baldosas.

La acumulación de polvo es uno de los principales problemas. Al estar pegados al muro, todas las deformaciones de la piedra aparecen en los lienzos en forma de deformaciones que es donde se queda el polvo. Dentro de esta particular ITV se ha realizado un mapa con las zonas donde hay más suciedad superficial. En la anterior campaña, la de 2017, se observó que en los lienzos 'Pueblo de fueros' y 'Pueblo de armadores' había mayor cantidad de suciedad y por tanto han requerido una atención especial. Santo Domingo explica que «ha costado determinar la razón de por qué en estos y no el resto». Al final han concluido que se debe a las corrientes de aire creadas con el aumento de la temperatura provocado por los focos y ventiladores ubicados bajo los bancos dispuestos en los brazos del crucero.

En esta revisión cuatrianual también se comprueba si hay alguna escama en las pinturas y se hacen tratamientos puntuales. Además, se elabora una cartografía con los datos de humedad y temperatura. Los resultados demuestran que la intervención arquitectónica ha funcionado y no se está produciendo una degradación. En el mapa aparece unos pequeños puntos rojos en el lateral derecho, a la altura de la bóveda, que se recogieron en 2017. «Si aumentaban de tamaño nos obligaba a llamar a Proyectos y Obras del Ayuntamiento y tratarlos desde el exterior. Afortunadamente no han crecido».

Con todas estos trabajos los lienzos «ahora están mejor que en 2013 porque en este tiempo ha ido desapareciendo el agua que tenían las paredes. No vamos a tener que hacer una gran inversión y los lienzos no están en riesgo»... salvo de disparos fortuitos.