Vuelve el micromecenazgo de Piztu META con 70.000 euros para quince proyectos

La quinta edición de la campaña de micromecenazgo Piztu META abre su plazo de inscripción de proyectos. La Diputación Foral de Gipuzkoa invertirá 70.000 euros en esta campaña que pretende apoyar a quince proyectos de carácter cultural y social promovidos por la iniciativa ciudadana y que podrán contar con el apoyo económico de las aportaciones de micromecenazgo de las asociaciones o particulares que se quieran sumar, a través de una campaña 'online' de recaudación de fondos.

Este proyecto que inicia su quinta edición busca «una mayor implicación de la ciudadanía en los proyectos culturales y una nueva fuente de financiación», ha explicado el diputado de Cultura, Harkaitz Millan.

Entre las cuatro ediciones anteriores se superaron los 600.000 euros destinados a los proyectos englobados en META, aunque advierte el diputado que este sistema define su importancia «más por la calidad que por la cantidad», porque «permite una elección democrática del apoyo social a los proyectos culturales y una implicación a nivel económico» por parte de los ciudadanos y asociaciones que hacen sus aportaciones. Con este sistema la diputación pretende «obtener financiación privada para complementar las subvenciones públicas» y «dirigir la financiación pública a aquellos proyectos e iniciativas con mayor respaldo social».

El año pasado se recibieron 38 proyectos, de los que se seleccionaron 15, y todos menos unos alcanzaron el objetivo económico de donaciones que se habían marcado. Iniciativas relativas al medio ambiente, la creación artística, la restauración, la memoria o las actividades familiares lograron financiarse por este método. La aportación ciudadana fue de 76.708 euros y la Diputación aportó otros 70.000 euros. El sistema de 'matchfunding' permite que la institución foral aporte la misma cantidad que ofrecen los ciudadanos a través de sus donaciones, con un máximo de 4.700 euros por proyecto.

El «espíritu de colaboración que se genera entre los propios promotores, que son capaces de crear cada uno desde su singularidad todo un proceso de captación de fondos para realizar su proyecto», es uno de los aspectos más positivos de este proyecto, según ha señalado la directora foral de Cultura, Mari Jose Telleria.

Para Naroa Corcobado, una de las impulsoras del proyecto Izadi Eskola, la experiencia de participar el año pasado en Piztu META «ha sido maravillosa». Este proyecto está impulsado por «padres y madres muy motivados por continuar dando a nuestros hijos una forma de estar diferente, más en contacto con la naturaleza, en la que prima más lo emocional y la gestión relacional, con un motor de aprendizaje que tiene al niño como protagonista».

En el caso de Guillermo Iraola, pudo poner en marcha con este sistema su Estudio Gau Gau en Lasarte, para «dar oportunidad a la gente en el barrio y en el pueblo para hacer actividades de artesanía de un modo muy participativo, para aprender a hacer cosas y colaborar. Tenemos que fomentar el formato pequeño y hacer cosas que no sean solo online, hay que seguir fomentando las relaciones entre las personas», ha destacado Iraola.