El Bergara busca confirmar la mejoría esta tarde en el derbi contra la UDA

Repetir un resultado favorable como el de la pasada semana en el derbi en Mojategi con el Mondra que concluyó con triunfo por 1-2, es el propósito marcado para esta tarde. Pero como destaca el entrenador de los mahoneros Iker Ruiz de Larramendi, no será un labor sencilla «nosotros estamos en una buena dinámica pero ellos también vienen de ganar varios partidos. No han perdido las seis últimas jornadas. Están cuatro puntos delante y también quieren salir de los últimos puestos de la clasificación», recuerda el técnico que pide un esfuerzo extra a sus hombres, «hemos trabajado la semana con intensidad y todos sabemos de la importancia del partido. Tendremos que dar algo más que en otras ocasiones. Es un derbi contra un equipo que necesita tanto como nosotros los puntos».

El apoyo desde la grada adquiere carácter esencial en estos partidos de rivalidad vecinal, «los jugadores sienten el empuje. Es muy importante para presionar a los rivales. Contaremos con todo el apoyo de los seguidores que a pesar de los malos momentos no han dejado de apoyarnos».

Recortar la diferencia de cuatro puntos de los atxabaltarras en la tabla y meter presión al resto de conjuntos que están pasando apuros, es prioridad a estas alturas de la temporada cuando quedan quince jornadas por delante.

El BKE dispone de 19 puntos y aún tiene lejos el objetivo de los 40 que aseguran la permanencia.

Los mahoneros empiezan a carburar tras una primera vuelta muy irregular y negativa en la que solo alcalizaron los 13 puntos, «tenemos una buena racha y hay que mantener esta tendencia», destaca Iker, que reconoce que al equipo le ha costado ajustarse, «hemos temido muchos cambios de jugadores y se ha rejuvenecido muchos la plantilla. Además está el inconveniente del campo. Tuvimos que jugar en Ipintza o fuera de casa y nos costó adaptarnos, y cuando empezábamos a jugar, llegó el estreno de Agrorrosin al que estamos cogiendo la medida».