Bibiano Serrano, un aguerrido agricultor

«Lo peor va a ser tener que ponerme corbata». Agricultor profesional por vocación y por obligación, Bibiano Serrano Calurano (27 de diciembre de 1960, Higuera de Llerena, Badajoz) se está haciendo a la idea pero, la verdad, no le gusta nada. Pasar de trabajar junto a sus dos hermanos en una explotación cerealista a ocupar durante buena parte de su tiempo un escaño en el Congreso va a requerir un cambio drástico de vestimenta a este hombre apegado a la tierra, uno de los rostros más reconocibles del campo extremeño y un crítico incorregible de las políticas agrarias, viniesen de Mérida, Madrid o la misma Bruselas.

Resucitador de Asaja en la provincia, alcalde de su pueblo (350 habitantes) desde 1999, siempre con mayoría absoluta, afiliado al PP desde 2003, Serrano, casado y con dos hijos, abraza la política de las Cortes Generales con un encargo muy concreto del presidente de la Junta, José Antonio Monago: que sea una voz tenida en cuenta para defender los intereses del potente sector agroindustrial de la región.