¿Pagaremos el autobús con el teléfono móvil?
Donostiabus pone en marcha una experiencia piloto de abono de la tarifa con los celulares, lo que podría extenderse a medio plazo
AINGERU MUNGUÍA
Miércoles, 6 de abril 2011, 04:58
El aumento meteórico de las funciones del teléfono móvil nos lleva a presagiar cualquier posibilidad futura. Hoy no sólo llevamos la cámara de fotos y la de vídeo en el celular, sino también el ordenador personal. La última tecnología permite ya realizar pagos con el móvil, lo que está siendo aprovechado por las compañías de transporte para agilizar el abono de la tarifa por parte de sus clientes. Donostiabus va a empezar a probar esta tecnología en los autobuses urbanos con el objetivo de poder aplicarla en cuanto se generalice su instalación en los móviles del futuro.
La respuesta al título de este reportaje es que sí. No sólo pagaremos el autobús, sino que abonaremos cualquier cosa que compremos en cualquier tienda. Es una cuestión de tiempo. Y no de mucho tiempo.
Se trata de la NFC (Near Field Communication), una tecnología de comunicación inalámbrica, de corto alcance y alta frecuencia que permite el intercambio de datos entre dispositivos a menos de 10 centímetros. Se comunica mediante inducción en un campo magnético, en donde dos antenas de espira son colocadas dentro de sus respectivos campos. La NFC trabaja en la banda de los 13,56 MHz, lo que hace que no se aplique ninguna restricción y no requiera ninguna licencia para su uso. A finales de 2010 Telefónica, La Caixa y Visa participaron en un proyecto piloto de pago mediante teléfono móvil con tecnología NFC en Sitges. Una iniciativa pionera en Europa, que involucró a más de 1.500 usuarios y 500 comercios. Este verano está previsto que mediante un sistema NFC se pueda acceder a las principales atracciones turísticas de Cáceres.
Hace unas semanas Telefónica, Vodafone y Orange llegaron a un acuerdo para establecer el estándar de tecnología NFC para realizar pagos mediante el móvil.
Jornadas en Madrid
El director de Donostibus y del Departamento de Movilidad, Gerardo Lertxundi, presentó el pasado 17 de marzo en Madrid, en las Jornadas ITS (Sistemas Inteligentes de Transporte), un proyecto para empezar a aplicar esta tecnología a los autobuses donostiarras.
La primera fase del proyecto durará hasta el verano. Un reducido número de trabajadores de Donostiabus comenzará a utilizar teléfonos móviles provistos de la tecnología NFC para el pago de la tarifa del autobús. En una segunda fase se extenderá esta experiencia piloto a unos 100 usuarios. Posteriormente, se probará la tecnología en los autobuses interurbanos de Lurraldebus, que disponen de los mismos lectores de tarjetas que en San Sebastián. Finalmente, el sistema se podría extender a todos los usuarios, con el único límite de que los teléfonos móviles incorporen esta tecnología, dado que no habrá que cambiar las actuales máquinas canceladoras.
En la actualidad sólo hay cuatro modelos de teléfono móvil que tengan el NFC -Nexus S, Nokia C7 y el 6212, y el Samsung S5230-, pero en los próximos meses se espera que lo vayan incorporando la nueva generación de celulares. La aplicación de esta tecnología dependerá menos, por tanto, de las compañías de transporte que del progreso tecnológico de las compañías de telecomunicaciones y de los fabricantes de móviles.
Para el usuario del autobús supondrá una mayor comodidad tanto a la hora del pago, como en la recarga, una operación que se podrá realizar al acceder al autobús evitando la situación de no poder pagar por no disponer de saldo. La consulta de los movimientos y del saldo también se podrá realizar desde el móvil. En definitiva, que nos ahorraremos el tener que ir a un cajero a recargar la tarjeta. Este sistema ahorrará tiempo en el acceso de los usuarios al autobús, y facilitará a los conductores la tarea de cobro. También presentará ventajas para el uso del transporte público por parte de los turistas que ya no tendrán que sacarse la tarjeta de la ciudad a la que viajen. Con sólo acercar el teléfono al lector del autobús será suficiente para abonar la tarifa.