Basagoiti elige al alavés Oyarzábal para ser el 'número dos' de la dirección del PP vasco

DV. Antonio Basagoiti, único candidato a presidir el PP vasco, situará al parlamentario Iñaki Oyarzábal, actual secretario general del partido en Álava, en la secretaría general del partido, en sustitución de Carmelo Barrio, también alavés y estrecho colaborador de la presidenta saliente, María San Gil. El peso de la delegación alavesa en el congreso, con 102 compromisarios, ha hecho valer su fuerza para defender que uno de sus dirigentes ocupase el segundo puesto en el escalafón de la futura ejecutiva que saldrá refrendada en el congreso regional que se celebra hoy y mañana en el Palacio Euskalduna de Bilbao.

Era el favorito en la mayoría de las quinielas. Iñaki Oyarzábal, de 41 años, accedió en 1996 al Parlamento Vasco, donde ha sido portavoz adjunto de su grupo en la Cámara vasca. Fue concejal en el Ayuntamiento de Vitoria y miembro del consejo social de la UPV. Oyarzábal, mano derecha de Alfonso Alonso en la ejecutiva alavesa, fue uno de los primeros dirigentes que abiertamente censuró la actitud de San Gil cuando la dirigente donostiarra cuestionó el pasado mes de mayo el liderazgo de Rajoy tras abandonar la redacción de la ponencia política del congreso de Valencia.

La elección del 'numero dos' tuvo un final reñido. Según señalan fuentes populares, hasta el último momento Basagoiti barajó designar a la parlamentaria irunesa Arantza Quiroga como secretaria general, candidatura defendida por la delegación guipuzcoana, que justificó su pretensión en que ningún miembro de este territorio había entrado en la ejecutiva nacional recién nombrada por Mariano Rajoy, mientras que sí hay representación vizcaína y alavesa. «Hasta la noche del miércoles la opción de Arantza Quiroga era la preferida, pero al final los alaveses han ganado el pulso», señalaron las mismas fuentes.

Junto al alavés Oyarzábal, Basagoiti quiere verse arropado en lo alto de la cúpula del partido por los presidentes territoriales de Álava y Gipuzkoa -Alfonso Alonso y María José Usandizaga-, que serán nombrados vicepresidentes, en un cargo de nueva creación que premiará el trabajo de ambos por cohesionar el partido.

Nuevo ciclo

El PP vasco abre un nuevo ciclo político, marcado por el diálogo con todos y la utilización de un tono más moderado para defender los principios «de siempre». La traumática retirada de San Gil de la escena política unió a los tres presidentes del partido en Álava, Vizcaya y Gipuzkoa para consensuar un candidato que recuperase la unidad tras sufrir una crisis interna sin precedentes.

Aunque el ex alcalde de Vitoria Alfonso Alonso era en principio el favorito -Rajoy lo prefiere en la primera fila del congreso- fue finalmente Antonio Basagoiti, líder de los populares vizcaínos, quien, animado por sus compañeros, dio un paso adelante para suceder a San Gil y protagonizar un cambio de estilo en la política que se ha ejercido en los últimos años, basada en la firmeza y en la crítica frontal hacia los nacionalismos. Basagoiti tiene un estilo propio y su deseo es que el partido salga de la incomunicación. Quiere un PP vasco más amable y más abierto a la sociedad.

En teoría el congreso cerrará también dos meses de turbulencia interna, salpicados de ácidas críticas, duros reproches y dimisiones. La presentación de un solo candidato amortiguará la resistencia que presente en la asamblea el sector crítico. Incluso los partidarios de San Gil con más renombre han manifestado su intención de apoyar a Basagoiti, para lograr que la formación supere su depresión y afronte con fuerza a la vuelta de verano la precampaña electoral, con una oferta más centrista y moderada.

Lo que sí consideran indispensable, y así lo han adelantado ya dirigentes cercanos a San Gil como Barrio o Abascal, es un reconocimiento público, en el congreso, a la labor de la presidenta saliente, para algunos «la persona más importante» de los populares vascos en los últimos años.