Como en casa, en ningún lado

Gran competidor, conoce el recorrido a fondo y también las líneas maestras que suelen definir la Itzulia. Veterano, a los 34 años no se verá sorprendido por nada y sus condiciones siguen siendo de alto nivel. En la Itzulia la competencia es más fuerte que en Estella, pero siempre ha ganado ante los mejores en la prueba de casa. Es el líder indiscutible del Cofidis, donde se ha hecho con esa posición en apenas un año en la formación francesa. Acaba de concluir una concentración en altura en el Teide y el triunfo de Estella avala ese trabajo.

Mikel Landa ha rendido a un nivel muy constante en todo el inicio de temporada, competitivo en todas las carreras que ha disputado en 2023. No se baja del top-10 y esa consistencia es un valor añadido a su habitual ciclismo de ataque. El alavés, ganador de dos etapas en la Itzulia hace ya tiempo, 2015 y 2016, tiene nivel deportivo para reclamar su puesto entre los favoritos, pero la ausencia de una llegada en alto limita sus opciones. Deberá buscar alternativas en la dureza que tiene la carrera.

Una de sus opciones más interesantes es el juego de equipo, ya que el Bahrain, dirigido por Neil Stephens, cuenta también con Pello Bilbao en sus filas y son dos bazas de primera categoría para controlar por parte de sus rivales. Landa cuenta con el respaldo del público, entregado a su brillantez y a las expectativas que siempre genera el ciclista alavés.

La Itzulia parece hecha a la medida de ciclistas como el gernikarra, hábiles cuando se acerca la pancarta de meta. Sin contrarreloj ni finales en alto, no son pocos los expertos que vaticinan llegadas en grupos pequeños en todas las etapas, con lo que las bonificaciones podrían jugar un papel determinante, no en vano se reparten 10, 6 y 4 en cada llegada.

Pello Bilbao, que batió en un sprint con todas las de la ley a Alaphilippe en la etapa alavesa del año pasado, es muy rápido en las llegadas y la montaña de Euskadi no tiene la dureza suficiente como para sacarle de carrera, por lo que sus opciones de estar en la lucha por la victoria son reales. Profesional meticuloso, el vizcaíno -otro producto del antiguo Euskaltel como Izagirre y Landa- ha recorrido los finales de etapa de la Itzulia para no dejar cabos sueltos. A los 32 años, está ante una gran oportunidad.

Perfil de corredor distinto al de Izagirre, Landa y Bilbao, Alex Aranburu puede ser uno de los grandes cazadores de etapas de la Itzulia, con su punta de velocidad. El ezkiotarra tiene por delante un recorrido que le ofrece excelentes oportunidades en las cinco primeras etapas.

Especialmente apropiadas para él parecen la segunda en Leitza y la cuarta en Santurtzi, calcada a la que ganó hace dos años, sin descartar la primera y la quinta. La tercera, en Hika, parece destinada a los hombres de la general y la sexta, con dos pasos por Arrate, debería excluir a Aranburu de la lucha por la general, pese a las bonificaciones que podría tener acumuladas. A los 27 años y ya en su segunda campaña en el Movistar, entra en su etapa de madurez para explotar todas sus magníficas condiciones de ciclista moderno. No pasó por el viejo Euskaltel, sino que subió con el Euskadi-Murias.