Lezo Garbia propone la desobediencia al PaP

La Plataforma Lezo Garbia dio a conocer el pasado miércoles por la tarde su apuesta por el inicio de acciones de desobediencia civil e insumisión ante la inminente implantación del puerta a puerta en Lezo y dado que ya se han comenzado a colocar los colgadores en algunos barrios como Lopene o Altamira y en algunos puntos del centro de la localidad.

A convocatoria de Lezo Garbia, el miércoles se celebró en el Auditorio Gezala la quinta asamblea de la citada plataforma opositora al PaP y favorable al quinto contenedor, la más importante a nuestro juicio» desde que se constituyó la misma hace un año. La asamblea contó con una nutrida asistencia de vecinos de Lezo opuestos al PaP, que llenaron el Auditorio, para conocer las últimas novedades con relación al nuevo sistema de recogida de residuos.

Colocación en fachadas

La mayor parte de sus preocupaciones estaba en el margen de maniobra que tenían ante la instalación por parte de los operarios de los colgadores para sujetar los cubos en algunas fachadas y preguntaron si esa actuación era legal al ser la fachada de un edificio propiedad privada. Desde Lezo Garbia se les invitó a acudir a la Ertzaintza para denunciar al Ayuntamiento por dicha colocación.

Miembros de la Plataforma criticaron que el gobierno municipal no haya respondido a la petición de una moratoria para implantar el PaP y colocar durante un tiempo el quinto contenedor para ver los resultados y recalcaron que «al igual que ha hecho Sortu planteando en sus estatutos la desobediencia civil y la insumisión, nuestra apuesta es también por dicha desobediencia, pero ojo sólo al puerta a puerta, no al reciclaje, con el que estamos de acuerdo».

En este sentido plantearon no ir a retirar los cubos que corresponden a cada residente para depositar sus basuras y dejar la misma a pie de calle y no cumplir la normativa municipal.

También pidieron que no se realicen sabotajes a los elementos colocados para el PaP, dado que «hasta ahora hemos llevado muy bien el tema y no debemos desviarnos de este camino».

Otra de las propuestas que hicieron fue la de desdomiciliar los recibos de las tasas municipales y acudir todos el mismo día al Ayuntamiento a hacerlo para colapsar así su funcionamiento.

Mostraron asimismo su preocupación por el elevado coste que está suponiendo la implantación del puerta a puerta al municipio de Lezo. «Dicho coste según los últimos datos conocidos asciende a 322.000 euros y ello sin contar las últimas actuaciones como los cursos para el compostaje o la oficina de Información instalada en Cultura y en la que por cierto no se ve nunca gente».