Tolosa

Ekin y Berriz, los dos programas de ayudas para estimular el comercio

Los programas Ekin y Berriz llevan ya muchos años intentando ayudar al sector, impulsados en las últimas tres legislaturas municipales, tanto por gobiernos de EH Bildu como del PNV. No ofrecen subvenciones determinantes, pero pueden ser un estímulo para los emprendedores. Ahora acaba de lanzarse una nueva convocatoria de ayudas de estos programas, destinada al fomento de nuevos negocios y a la reactivación comercial. Las personas interesadas pueden acercarse a Udate (Oficina de Información) para recibir datos sobre esta línea de ayudas. De lunes a miércoles, de 7.15 a 14.15; los jueves, de 7.15 a 19.00, y los viernes, de 8.15 a 14.15. Hasta el 20 de septiembre.

Jaione Urreta y Asier Balda, técnicos de la asociación comercial Tolosa&Co, no quieren caer en la desesperanza. «Ya hay demasiados mensajes negativos en torno al sector», exponen. «Hay programas dirigidos a trabajar el tema del relevo y, ahora más que nunca, hay que visibilizarlos», dicen. «Son muchas las noticias que escuchamos últimamente sobre comercios que se están cerrando porque a los dueños les llega la hora de jubilarse y no hay sustitutos, pero también hay comercios que se están abriendo y otros a los que les va muy bien», insisten. «Por eso, añaden, es importante dar visibilidad a estos, también con el objetivo de motivar al sector y animar a la gente a que consuma en clave local».

El objetivo de Ekin es apoyar y ayudar en la puesta en marcha de nuevas iniciativas empresariales. La subvención se podrá solicitar para la rehabilitación del local comercial y los gastos de alquiler o compra del local. La ayuda se concederá según la puntuación objetiva sobre el proyecto presentado. Para ello, se deberá presentar un plan de viabilidad y un proyecto de negocio para percibir la subvención. Se darán más ayudas para negocios en la Parte Vieja. Se reservan 60.000 euros para los gastos de alquiler del local y 20.000 euros para gastos de adquisición y reforma o rehabilitación de local.

El programa Berriz trata de dar salida al problema de la falta de gente joven dispuesta a seguir con negocios consolidados. Desde que se puso en marcha el programa, en 2015 se ha garantizado el traspaso de casi veinte comercios. Y en camino hay algunos más, aunque no se pueden desvelar nombres porque la confidencialidad es uno de los pilares de esta iniciativa.

El programa Berriz pretende mantener el diseño de la estructura comercial del municipio sin desdibujar sus propias señas de identidad. No es un proceso fácil porque intervienen muy diferentes factores –que hay que saber conjugar–, entre el propietario actual y un nuevo emprendedor que quiere continuar un negocio que ya está en marcha, y que no precisa de años previos de aprendizaje y afianzamiento.

Podrán ser personas beneficiarias de estas ayudas las personas físicas, trabajadoras por cuenta propia o autónomas, y las personas jurídicas, siempre que cumplan los requisitos establecidos en las bases.