De Trintxerpe a San Pedro, de pesquero en pesquero
Durante la época dorada del bacalao y la ballena los barcos de pesca se contaban por decenas y llenaban buena parte del Puerto de Pasaia cuando estaban atracados
Jueves, 9 de diciembre 2021, 13:12
Hubo un tiempo no muy lejano en el que la flota pesquera de Pasaia vivía los años locos de la pesca del bacalao y, otrora, de la ballena. Un tiempo en el que los pesqueros ocupaban tanto espacio en el puerto que uno podía ir pasando de barco en barco desde Trintxerpe hasta San Pedro.
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Eran los tiempos dorados de la actividad pesquera en el entorno de Pasaia, pero todo comenzó lejos de esa zona portuaria. Para encontrar el germen del puerto hay que trasladarse hasta una zona que hoy en día queda lejos del mar, más o menos al punto en el que hoy se encuentra el Bar Zumardi de Errenteria. Allí se atracaron las primeras txalupas.
Pero empecemos por el principio. Y para ello nada mejor que hacerlo de la mano del historiador David Zapirain: «Lo primero que hay que tener en cuenta es que lo que hoy es un puerto industrial antes era una bahía natural y el punto de interés ha cambiado mucho a lo largo de la historia. La bahía se ha usado no sólo hasta Errenteria, sino también hasta Oiartzun».
Y es que, según cuenta el historiador, «la primera villa marinera de la comarca es Errenteria, convertida en Villanueva de Oarso. Lezo y San Juan son zonas ganadas al mar que se convierten en zona de usos marítimos prácticamente desde la Edad Media». Conviene tener en cuenta que «el uso de la bahía y su transformación en un puerto es un largo proceso que ni siquiera es lineal. En unas fases se emplean unas partes de la bahía y en otras, unas distintas». Lo que tuvieron claro los primeros habitantes de la zona es que «se trata de un puerto interior muy seguro».
Épocas doradas de la pesca
El historiador David Zapirain cita dos momentos de grandeza de la flota pesquera del Puerto de Pasaia: «Si bien, al ser una ría, la pesca ha sido siempre una característica habitual». Esos dos momentos álgidos datan «uno del siglo XVI con la pesca en los caladeros de Terranova» y otro «a partir de los años 20 en lo que se ha conocido como la gran pesca de altura de Pasaia». El bacalao y la ballena fueron protagonistas allá por el siglo XVI, mientras que la ballena ya apenas se pescaba a partir de los años 20. Hoy en día la actividad pesquera en el puerto está lejos de lo que fue: «Los menores de 40 años difícilmente pueden imaginar el puerto lleno de pesqueros. Hubo una época en la que todo el puerto entre Trintxerpe y San Pedro estaba lleno de pesqueros sin apenas espacio entre ellos».
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La pesca ya no es una actividad principal en la bahía y Zapirain cree que de cara al futuro «la pesca de bajura puede ser una actividad interesante», ya que «habrá restricciones cada vez mayores para el uso del petróleo». Y es que «la pesca no puede ser extractiva, contaminante y destrozar los ecosistemas, por eso la pesca de bajura puede tener un lugar más importante en el Puerto de Pasaia del futuro».
El bacalao fue clave para entender las dos épocas doradas de la actividad pesquera
Blas de Lezo
La escuela náutica trabaja para asegurar el relevo
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Uno de los principales problemas con los que se encuentra la pesca de bajura es la falta de relevo generacional. Cuesta encontrar jóvenes que sigan los pasos de los patrones que van alcanzando la edad de jubilación. En ese sentido, la Escuela Náutica CIFP Blas de Lezo LHII lleva años trabajando en la formación de jóvenes que puedan el día de mañana dedicarse a la pesca de bajura. En su cartel tiene los grados de técnico en mantenimiento y control de la maquinaria de buques y embarcaciones, técnico en navegación y pesca litoral, técnico superior en organización del mantenimiento de maquinaria de buques y embarcaciones y técnico superior en transporte marítimo y pesca de altura. Estos cuatro grados permiten acceder a la pesca de bajura. Ana María Manzano es la directora del centro y explica que los cursos que dan acceso a bajura los tenemos «medio llenos» y quiere llamar la atención sobre una salida profesional en la que existe demanda: «Hoy en día hay trabajo y las condiciones no son las de antes. Muchos de los pescadores de bajura, por ejemplo, duermen en casa». Además, los jóvenes pueden «hacer prácticas desde el primer verano en barcos de pesca y salen de la escuela con toda la titulación necesaria para navegar«.
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