Fisia

Centro de fisioterapia Fisia, detectives contra el dolor en Donostia

El trabajo de Fisia comienza por conocer al paciente y su dolor: «No nos gusta quedarnos con un nombre o un simple diagnóstico, vemos a través de nuestras manos y analizamos tus dolencias para dar con la raíz del problema»

Miércoles, 30 de marzo 2022, 12:37

Son muchas las personas que padecen algún tipo de molestia y que, en lugar de darle la importancia que requiere y tratar ese dolor, se acostumbran a vivir con él. En Fisia, clínica de fisioterapia ubicada en la calle Okendo de Donostia, les apasiona la búsqueda del bienestar de los pacientes y, a través de su cercanía y del trabajo en equipo, en el que incluyen también al paciente, conocen a fondo a las personas. Con el análisis de las pistas, comprenden el origen de ese dolor.

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«Nos apasiona la búsqueda del bienestar y la salud de nuestros pacientes, por lo que los objetivos de cada tratamiento se convierten en nuestras metas. Para ello, siempre nos ponemos en la piel de cada uno de ellos para poder comprender qué es lo que necesita y cómo podemos abordarlo de la manera más eficaz y personalizada posible», explican desde el team de Fisia.

Los fisioterapeutas de Fisia se consideran «detectives contra el dolor» y lo explican así: «No llevamos gabardina, la cambiamos por el uniforme para poder tratarte como te mereces. Tampoco tenemos lupa, nos valemos de diferentes test y conocimientos necesarios para analizar y descifrar el misterio que trae cada uno con su dolor».

¿Pero cómo logran ser detectives del cuerpo? Cuando llega un paciente con dolor ya está ofreciendo la primera pista de que algo no va bien. «El dolor es la forma que tiene el cuerpo de expresarse y hay veces que incluso las emociones pueden llegar a provocar diferentes síntomas». Hay una frase muy ilustrativa de todo esto: «El cuerpo grita lo que la boca calla». Por eso hay personas que se pasan toda la vida sin ir al fisioterapeuta. Creen que no lo necesitan.

«¿Ha sentido alguna vez dolor?»

A las personas habría que hacerles la siguiente pregunta: '¿Ha sentido alguna vez dolor, molestias o algún síntoma?' Es prácticamente imposible encontrar a alguien que diga que no a esa pregunta. Un simple dolor de cabeza, un pinchazo, una sensación de hormigueo, mareo, estreñimiento, ansiedad, estrés, tensión en la mandíbula, dolores menstruales o premenstruales, sensación de carga o tensión en la espalda... Todo eso es catalogado como 'normal' por las personas que padecen el dolor, pero en realidad no lo es. Se puede decir que es común, porque muchas personas padecen estos síntomas algún día, pero eso no quiere decir que quien padece estas molestias deba vivir con ellas.

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Por tanto es fundamental no acostumbrarse al dolor puesto que es un aviso de que algo anda mal. No significa que el problema esté en el mismo lugar del dolor, en general el dolor es la última expresión de algo que no está funcionando bien y que se está acumulando. Nuestro cuerpo es sabio y no le gusta vivir con dolor, por lo que busca compensar, adaptarse y modifica su estructura para evitar sentir dolor. Esto hace que nuestro cuerpo vaya generando nuevas lesiones, bloqueando puntos de nuestro cuerpo y sobre-utilizando otros para compensar esas zonas bloqueadas. Todo esto terminará en nuevas lesiones y patologías que hoy no las escuchas porque susurran, pero seguramente dentro de diez años el cuerpo gritará.

Edades para prevenir

La experiencia dice que los pacientes que se encuentran entre los 20 y los 65 años están en la mejor etapa para prevenir. Por su parte, por los mayores de 65 años que tienen dolor se puede hacer mucho a través de la fisioterapia para alcanzar una buena calidad de vida. Quienes tienen esa edad y no tienen ningún dolor están de enhorabuena, pero es un buen momento para dedicar algo de tiempo a la prevención.

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«Vivir no duele, pero vivir con dolor sí, ¿por qué vivir con él? Te invitamos a escuchar a tu cuerpo y que busques la prevención de tus lesiones. Junto con nuestro equipo de fisioterapeutas y osteópatas, nos gusta implicar a nuestros pacientes en el proceso de recuperación, para enseñarles que la fisiosteopatía, el movimiento y la alimentación dan como resultado un buen estilo de vida», explican los expertos de Fisia. En esta clínica de la calle Okendo se alejan «de los típicos tratamientos de inicio y fin de una sintomatología, buscando un bienestar puntual y haciéndolo dependiente de nuestras manos para el alivio, sino que dependa mucho más de cada uno de nuestros pacientes».

Ir al fisioterapeuta para un masaje o para que te alivie un poco el dolor ya está pasado de moda. Por eso en Fisia «hemos querido llevar la fisioterapia a un nivel más dinámico y que no sólo se centra en una consulta puntual. Enseñamos que el secreto para una buena salud reside en el movimiento y la prevención». Una de las claves de Fisia es que «trabajamos junto con las personas para que conecten con sus dolores y lesiones. Les enseñamos los conocimientos necesarios para que entiendan la importancia de involucrarse en el proceso».

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Herramientas para los pacientes

El equipo de Fisia, desde su «pasión» por su trabajo, facilita a sus pacientes «nuevas herramientas, técnicas y conocimientos» para que, de la mano de sus especialistas, sean «capaces de cambiar su estilo de vida y comprender su cuerpo». En definitiva, se embarcan con el paciente «en este viaje en el que no sólo conocerá y descubrirá su cuerpo, sino que, juntos, despejamos todas las incógnitas sobre su dolor».

Más información

C/Okendo, 24 bajo – Donostia-San Sebastián

Tel.: 943 041 122

Web:www.centrofisia.es

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