Urkullu pide «una misma estrategia» contra el coronavirus en toda España con mascarilla obligatoria en la calle
El lehendakari lamenta la «disparidad de resoluciones judiciales» y critica que el Gobierno central insista en decir que las comunidades tienen herramientas suficientes
xabier garmendia
Lunes, 20 de diciembre 2021, 10:24
A dos días de que el Gobierno y las comunidades autónomas analicen nuevas medidas contra la sexta ola de la pandemia, Iñigo Urkullu ha reclamado este lunes «una misma estrategia en el conjunto del Estado y de la Unión Europea» para frenar la expansión del virus. En su intervención en el Foro Expectativas Económicas del Banco Santander y El Correo en Bilbao, el lehendakari ha concretado su propuesta en el regreso a la mascarilla obligatoria en exteriores, la extensión del pasaporte covid «a todos los ámbitos en los que sea posible», la realización de test y acciones preventivas como la distancia, la higiene de manos y la ventilación, así como evitar aglomeraciones. Sin embargo, no ha querido mencionar eventuales restricciones ante las inminentes celebraciones navideñas.
El jefe del Ejecutivo autonómico se ha referido a la expansión de la variante ómicron como la principal amenaza. Una situación que, bajo su punto de vista, ha abierto un «tercer periodo» de la pandemia en coincidencia con las tres ocasiones en las que su gabinete ha declarado la emergencia sanitaria en Euskadi. Pese a congratularse de los altos índices de vacunación -un 91% de la población diana-, ha advertido de que «la presión hospitalaria es creciente y afecta a la Atención Primaria». En todo caso, ha mandado un mensaje de optimismo a la ciudadanía al asegurar que «hemos superado cinco olas y vamos a superar esta sexta». «Tengo plena confianza en la sociedad vasca», ha añadido.
Para responder a este nuevo azote del covid, Urkullu estima necesario «mejorar nuestras herramientas, nuestra coordinación y la cobertura normativa de las medidas que deban adoptarse en cada momento». En su discurso, ha criticado que el Gobierno central insista en decir que las comunidades autónomas disponen de las herramientas suficientes para actuar. «La realidad ha venido a demostrar la inefectividad de esta expresión», ha afirmado. Se ha escudado en la «disparidad de resoluciones judiciales» que se ha producido entre los territorios frente a una situación sanitaria que, ha puntualizado, «demanda herramientas adicionales y con seguridad jurídica». En este sentido, ha reclamado una 'ley antipandemia' como la vasca a nivel nacional.
La polémica de las cabalgatas
El lehendakari ha reiterado la necesidad de una «adecuación urgente» de la legislación. Ha insistido, como viene haciendo en las últimas semanas, en modificar el real decreto que regula el uso de la mascarilla en toda España. El Gobierno vasco quiere que el tapabocas sea obligatorio de nuevo en la calle y que no se limite meramente a los espacios interiores. Pero ahora el Gabinete autonómico extiende su petición de medidas comunes al resto de ámbitos. También a la vacunación, al uso del pasaporte covid, al refuerzo en la realización de test y el rastreo de casos. Esa es la principal idea que trasladará el propio Urkullu a Pedro Sánchez y el resto de presidentes autonómicos en la Conferencia del miércoles por la tarde.
En cambio, el lehendakari no ha querido mojarse en torno a hipotéticas restricciones para las celebraciones navideñas. Dada la falta de herramientas jurídicas, el Gobierno vasco se limitará a plantear «recomendaciones». Respecto a la disparidad de los ayuntamientos vascos en torno a la organización de las cabalgatas de Olentzero y Reyes Magos, no ha entrado a censurar las decisiones de Vitoria y San Sebastián, que a diferencia de Bilbao sí organizarán actos. Urkullu se ha limitado a recordar que cualquier tipo de evento se debe «adecuar» a las circunstancias para evitar aglomeraciones y ha traspasado cualquier responsabilidad a los consistorios. «Cada uno sabemos si nuestro municipio está en riesgo, el mapa es claro», se ha reafirmado.
El mandatario vasco despliega su planteamiento ante la constatación de que «la vacunación es necesaria, pero no es suficiente». Aun así, ha querido enviar un mensaje de «confianza, esperanza y ambición». Se ha refugiado para ello en las previsiones económicas, que sitúan la tasa de crecimiento por encima del 5% este año y del 6% para el que viene. «En dos años recuperaremos la pérdida provocada por la pandemia», ha señalado. También se ha felicitado de que la tasa de paro se sitúe ya por debajo del 10%, objetivo que se había propuesto su Ejecutivo para la legislatura de la recuperación, y de que la recaudación fiscal haya «evolucionado muy positivamente este año». Además, ha recordado el «apoyo» que concederán los fondos europeos.