La oposición acusa a Darpón de hacer «escapismo» y «echar balones fuera»

Las explicaciones aportadas por el consejero de Salud, Jon Darpón, y la directora general de Osakidetza, María Jesús Múgica, no convencieron a los grupos de la oposición, que no encontraron respuesta «a prácticamente ninguna» de las preguntas formuladas durante las seis horas y media de comisión. Sus intervenciones fueron «un ejercicio de escapismo», en palabras de Laura Garrido (PP), «de echar balones fuera», según Rebeka Ubera (EH Bildu) y una manera de ocultar «la permisividad con un catálogo de prácticas mafiosas» en los procesos de selección de personal, a juicio de Cristina Macazaga (Elkarrekin Podemos).

Rebeka Ubera reprochó al consejero que su único afán fuera defender la labor de su equipo, «en vez de proponer medidas para solucionar el problema». A juicio de la parlamentaria de EH Bildu, no basta con que, a la vista del análisis psicométrico elaborado por la Universidad de Oviedo, Osakidetza haya decidido investigar cuatro categorías más. «La investigación habría que extenderla por lo menos a otras 13 especialidades, ya que los indicios de irregularidades son cada vez mayores».

En esta línea, Ubera desveló el contenido de una de las actas de un tribunal de la OPE, en la que uno de sus miembros aboga por que los dos exámenes los haga el IVAP porque en procesos anteriores las «presiones» sobre los tribunales han sido «sistemáticas» y «han dado lugar a filtraciones», dijo. La parlamentaria también dio a conocer un email anónimo recibido este pasado miércoles, enviado supuestamente por una subdirectora de una OSI a una trabajadora aspirante a una jefatura, para que fuera ella misma la que eligiera la composición del tribunal. «Necesito seis nombres de jefes de servicio para formar parte del tribunal (...) No tengo fecha, va lento pero va», leyó Ubera, que señaló que pondrá en manos de la Fiscalía esa información. En opinión de la portavoz de EH Bildu «se ha caído un mito, el de que el PNV es un buen gestor».

En la misma línea fue Cristina Macazaga (Elkarrekin Podemos), que se mostró convencida de que existe un «catálogo de prácticas mafiosas» en las OPE de Osakidetza. «El sistema corrupto de reparto de puestos se ha convertido en un castillo de naipes que están empeñados en apuntalar», acusó la parlamentaria de la formación morada que calificó de «insólito» que un Gobierno «lleve a la Fiscalía a las personas que denuncian irregularidades». «Han gastado muchos recursos y energías en ocultar lo que todo el mundo sabe. ¿No oía usted el runrun cuando ejercía como profesional?», inquirió a Darpón, en referencia a la extendida rumorología sobre las OPE hechas a medida para puestos ya dados con antelación. Sobre el análisis psicométrico dijo que «no nos ha aportado nada que no sepamos». A su juicio, está siendo una «coartada» para que «parezca que el Gobierno hace algo».

Garrido (PP) achacó a los responsables de Salud que «están haciendo un ejercicio de escapismo, tratando de parapetarse en expedientes que ni siquiera conocemos». Por su parte, Natalia Rojo (PSE) hizo constar su preocupación. «Parece que hay algunas anomalías ante las que habrá que tomar cartas en el asunto y creo que ya se está haciendo», valoró la parlamentaria, socia de Gobierno del PNV.

El sindicato ELA, por su parte, solicitó «el cese del señor Darpón de inmediato» porque tanto el consejero, como el Gobierno Vasco, apunta Esther Saavedra, «se niegan a asumir sus responsabilidades e intentan criminalizar a los denunciantes». En la misma línea fueron las declaraciones de Patxi Nicolau, de ESK, a quien sorprende que la «exhaustiva» investigación «solo haya puesto de manifiesto deficiencias en el modelo de examen o en el método de corrección».