Miles de personas secundan la movilización en Bilbao a favor de la Sanidad pública
FERMÍN APEZTEGUIA
Domingo, 26 de junio 2022, 12:38
El incendio provocado hace quince días por la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ya se ha extendido a la calle. La lluvia y el tiempo desapacible no impidió que miles de ciudadanos llenarán este domingo la Gran Vía de Bilbao en defensa de la sanidad pública vasca, y en particular la atención primaria, y para pedir también la dimisión de la dirigente jeltzale. La protesta, convocada por todos los sindicatos con representación en Osakidetza –Satse, ELA, LAB, CC OO, UGT y ESK– y respaldada también por la organización profesional Lehen Arreta Arnasberritzen (LAA, Nuevos Aires para la Atención Primaria) transcurrió con normalidad.
«Esta es la única forma que nos queda para protestar por la dejadez y el abandono en el que Euskadi está dejando a su servicio público de salud», protestaba al comienzo de la movilización un manifestante. «Ahora que hemos pasado lo más duro de la pandemia, vemos con tristeza que Osakidetza está mucho más desmantelada de lo que nos habían hecho creer», argumentaba este sanitario.
La movilización llegó tras las declaraciones realizadas por Sagardui el pasado día 8, cuando adelantó que la falta de médicos obligará a los pacientes a desplazarse para ser atendidos por su médico de cabecera; y que en verano habrá consultas cerradas o atendidas solo por enfermeras. Su discurso –matizado con posterioridad por la consejera, que llegó a pedir disculpas– generó un profundo malestar en el sector sanitario, que viene denunciando la precariedad de Osakidetza desde años antes de la pandemia de covid.
«Que nos cuiden y nos tengan presentes, que para eso hemos cotizado toda la vida», se quejó una manifestante
La marcha atrajo no solo a trabajadores de la sanidad pública vasca, también a sus usuarios. Hubo mucho pensionista, cuadrillas de amigos, incluso familias con niños. Antes de que arrancara, a la altura de la sede del Gobierno Vasco en Bilbao, en la Gran Vía, las centrales sindicales analizaron los motivos de la convocatoria.
«Voluntad e inversión»
La portavoz del sindicato de enfermería Satse, Amaia Mayor, se dirigió a Sagardui para decirle «alto y claro» que «apostamos por la sanidad pública y queremos protegerla». Los problemas de la sanidad vasca, añadió, «se pueden solucionar; es cuestión de voluntad y de inversión». La delegada sindical de ELA Esther Saavedra calificó de «gravísimas» las declaraciones de la consejera, por lo que delatan. «Las medidas anunciadas –aseveró– ya están aquí».
La marcha arrancó sobre las doce del mediodía tras una pancarta en la que podía leerse el lema 'Osakidetza salba dezagun' ('Salvemos Osakidetza'). Durante el recorrido, los manifestantes corearon consignas como 'Hemen gaude, enpleguaren alde' ('Aquí estamos, a favor del empleo'), 'Por una sanidad pública y de calidad' y otros más beligerantes como 'Y si esto no se arregla, leña, leña, leña; y si esto no se apaña, caña, caña, caña'.
El delegado sindical de LAB Jesús Oñate hizo un llamamiento «a la plantilla y la población» para que se sumen «a la lucha por la defensa de la sanidad pública y para paralizar las políticas que están beneficiando a la sanidad privada». «Somos muchos los trabajadores de Osakidetza y ciudadanos que hemos venido porque se ha hecho necesario reivindicar una sanidad pública y de calidad», defendió la representante de UGT Mari Feli Campos.
En un momento de la marcha, los manifestantes corearon gritos a favor de la dimisión de Sagardui. «La consejera ha comenzado un proceso de desmantelamiento de Osakidetza y la atención primaria, que no vamos a permitir», advirtió Iñigo Garduño, de CC OO. En varios momentos, los viandantes que aprovechaban la mañana del domingo para pasear recibieron la llegada de la marcha con aplausos de apoyo.
«Como jubilada no me queda más remedio que venir a este tipo de movilizaciones. ¡Cómo no vamos a hacerlo si no nos llega ni para papel higiénico!», se quejó una manifestante. «¡Que nos cuiden y que nos tengan presentes, que para eso hemos cotizado toda la vida!».
Al término de la movilización, las portavoces de Satse y ELA dieron lectura a sendos manifiestos en un pequeño acto ante el ayuntamiento. «Se van a cerrar servicios y la ciudadanía nos vamos a tener que defender más y más a menudo», advirtió Saavedra. «Es vergonzoso que el Gobierno Vasco haya terminado 2021 con un superávit de 1.456 millones y estemos en esta situación», apostilló Amaia Mayor.