Ampliaciones y nuevos edificios en cinco hospitales de Gipuzkoa
Los centros sanitarios Onkologikoa, Donostia, Zumarraga, Alto Deba y Bidasoa serán reformados en los próximos meses
La Osakidetza postpandemia contará con más espacios para atender las crecientes necesidades de la población vasca. En el caso de Gipuzkoa, hasta 5 hospitales (Onkologikoa, Donostia, Zumarraga, Alto Deba y Bidasoa) serán objeto de ampliación o reforma para aumentar su capacidad, a lo que habrá que sumar el proyecto de nuevo hospital en Tolosa, aún en fase muy incipiente. Las inversiones alcanzarán también a los ambulatorios, con el alumbramiento de dos nuevos centros de salud, en Ordizia y la Parte Vieja de San Sebastián.
El caso más relevante es el futuro centro de protonterapia para el tratamiento del cáncer que se instalará en Donostia junto a Onkologikoa. La máquina, que cuesta 28 millones de euros y será financiada por la Fundación Amancio Ortega, permitirá tratar algunos tumores de manera «muy localizada y precisa», evitando irradiar tejidos sanos de alrededor.
Las grandes dimensiones del equipo hacen necesario construir un nuevo edificio que correrá a cuenta de Osakidetza. También en la capital guipuzcoana, está en proyecto un nuevo edificio para consultas externas del Hospital Donostia.
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En Arrasate, el Hospital del Alto Deba se ampliará tras la demolición del antiguo Centro Asistencial, embrión del hospital actual. Tras una inversión de 24 millones de euros y cuatro años de obras, la nueva instalación permitirá crear una nueva unidad de digestivo, otra de rehabilitación, e integrar una sala de resonancia magnética dentro del centro, entre otras mejoras.
Extensión en Bidasoa
En Zumarraga, se invertirán 10 millones hasta 2024 en la construcción de un nuevo edificio quirúrgico. También se renovará el bloque quirúrgico del Hospital del Bidasoa, aunque este proceso se ha ralentizado por las protestas de usuarios del centro porque el plan era trasladar las operaciones a Donostia durante los 18 meses que iban a durar las obras. Ello ha hecho que Osakidetza haya renunciado al plan inicial y esté diseñando un nuevo proyecto. Sagardui anticipa que «se va a ampliar el hospital actual para albergar en esa extensión las operaciones quirúrgicas, de modo que se pueda compaginar la renovación de las instalaciones quirúrgicas y el mantenimiento de la actividad». Esta idea está pendiente aún de desarrollar el nuevo proyecto arquitectónico.