La Real tendría que haber ganado. Fue claramente superior en la posesión, ante un Rijeka muy metido atrás con un 5-4-1 cerrado y ... sus once futbolistas siempre detrás del balón y sin presionar, con las líneas muy juntas para que la Real no encontrara espacios por dentro y buscando salidas a la contra, idea que le funcionó.
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La posesión, sí, pero la Real no tuvo verticalidad. No es fácil ante un rival tan cerrado, pero aún así el equipo blanquiazul creó 28 ocasiones de gol. Metió dos. El Rijeka hizo otros dos con cinco oportunidades. Las cifras son bastante indicativas de lo que fue el partido. Aunque costó mucho, la Real no dejó de intentarlo y consiguió encontrar líneas de pase, pero faltó concretar ese dominio tan constante.
Está claro que los partidos se ganan, se pierden y se empatan por los goles. Volvimos a ver a esa Real de Europa, un equipo al que le cuesta mucho ver portería. Con los dos goles de ayer al Rijeka, solo ha anotado cuatro en las cinco jornadas disputadas de la Europa League. Hizo uno en campo croata y otro al AZ en Anoeta. En un partido como el de ayer en Liga, habría marcado cinco como mínimo, pero en Europa no están llegando.
Se puede dominar durante largos minutos, pero si no defiendes bien el balón parado...
Los dos goles encajados por la Real llamaron la atención. El primero, por la falta de comunicación total entre Remiro y Monreal, que acaba en córner y a continuación en gol, tras una peinada en el primer palo. Antes del primero de la Real, el portero blanquiazul tuvo que evitar con una excelente acción el 0-2, al desbaratar un mano a mano. El segundo tanto croata también llegó a balón parado, con un hombre completamente solo en el punto de penalti. Se puede dominar durante largos minutos, pero si no defiendes bien la estrategia...
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Destacar el golazo que marcó Bautista dándose la vuelta y poniéndose de cara. Merece más minutos viendo cómo están Isak y Willian José ahora mismo. El delantero errenteriarra ha marcado la mitad de los goles del equipo en esta competición, dos: ayer y en Rijeka. Los otros han sido obra de Portu (al AZ) y Monreal (ayer).
La Real generó multitud de ocasiones, pero también estuvo cerca de perder. Por lo menos, se salvó un punto. El Rijeka lo celebró, porque hasta el momento no había sumado ninguno en cuatro jornadas.
El empate es una forma de complicarse las cosas para ir a Nápoles. A la Real no le queda otra opción que ganar en San Paolo, dando por hecho que el AZ derrotará al Rijeka. Para no depender del otro resultado, solo vale ganar. El objetivo está claro y siempre hay esperanzas de poder ganar en un campo así.
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Por ultimo, comentar la jugada atípica del partido. Fue curioso ver cómo el árbitro corregía su decisión de pitar penalti a favor de la Real en el primer tiempo. Resultó llamativo, puesto que en la Europa League no hay VAR. Seguramente, habría cambiado el partido, pero estuvo bien corregido.
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