Los damnificados de Rafinha Alcántara

Es el caso, principalmente, de Robert Navarro. La posición ideal para Rafinha Alcántara es la de interior derecho en la tercera altura del centro del campo, precisamente donde juega David Silva. Si el canario no estaba, el oriotarra solía tirar de otros recursos como Navarro, que perderá, si cabe, más protagonismo del que ha tenido. El catalán ha jugado siete partidos de los veintiséis que ha disputado la Real en lo que llevamos de curso, pero con solo 259 minutos, un escaso 11% de los minutos totales. Su presencia en el primer equipo peligra, toda vez que Imanol no termina de creer en él y al mismo tiempo el Sanse de Xabi Alonso no encuentra ese centrocampista desequilibrante. El mediapunta podría jugar la segunda mitad del año con el filial.

Sin lugar a dudas, Rafinha está encantado de venir a la Real puesto que solo ha disputado cinco partidos con el PSG, pero el entorno del jugador reconoce a este periódico que «si termina en la Real es para jugar cada domingo». El brasileño tendrá que pugnar por la titularidad con Silva, aunque apunta a ser importante en el equipo.

Los otros dos perjudicados son Beñat Turrientes y Jon Guridi. El beasaindarra ha dado un paso adelante no con el Sanse, sino con el primer equipo. Imanol ha tirado de él cuando Merino y Silva han causado baja y la llegada de Rafinha afectará a sus minutos. En todo caso, su situación no parece que vaya a tener el mismo desenlace que la de Navarro. El futbolista de diecinueve años ha encandilado al staff y a sus propios jugadores y podría continuar estando a caballo entre primer equipo y el filial.

Rafinha juega como interior derecho, pero también podría jugar por la izquierda, donde Merino es intocable y donde aparecen de segunda línea Turrientes y Guridi. El azkoitiarra apenas ha tenido continuidad, no porque Alguacil no le vea válido, sino porque sus continuos problemas musculares le han obligado a jugar solo dos partidos. Disputó nueve minutos ante el Rayo Vallecano en el mes de agosto y los noventa que tuvo ante el Zamora en Copa, con gol incluido. Rafinha también debería adelantar a un Guridi que con 26 años no termina de hacerse su sitio en el primer equipo. Guevara, en menor medida, también podría rebajar su minutaje, toda vez que Imanol ha solido colocarlo como interior en algún que otro partido junto a Zubimendi.

Rafinha es un jugador polivalente hasta tal punto de que puede jugar en banda derecha. Así lo demostró en la 13/14 con Luis Enrique, donde con veinte años realizó una grandísima temporada anotando cuatro goles, dos de ellos a la Real Sociedad en Anoeta. En caso de que Imanol pierda a Januzaj o Portu el brasileño podría ocupar su plaza. Del mismo modo, si Imanol opta por el 4-4-2 sería válido escorado en la derecha o como segundo punta por detrás del delantero.