-
1
Velocidad de crucero.
Tras el irregular inicio la Real vuelve a parecerse a la de años anteriores. Porterías a cero, solidez y momentos de brillantez que se ... convierten en goles. Además pudo dar descanso a los habituales. Las Palmas y Celta son una buena oportunidad para acabar bien el año.
-
2
Urko aprueba el parcial.
El teórico sustituto de Zubimendi estaba ayer bajo la lupa. Se puede decir que aprobó con buena nota el parcial. Se ofreció. Rompió líneas y se mostró poderoso en los duelos. Le falta un examen de verdad ante un rival más potente pero los aplausos de Anoeta le vendrán bien para la confianza.
-
3
Oyarzabal en racha.
El capitán pudo dedicar dos goles a su hijo Martin, que el domingo cumplió un año. El partido no pintaba bien para él ante un rival muy cerrado pero fue el más listo de la clase al forzar el penalti y marcar el rechace. Pena que se manchara su gran estadística desde los once metros con la Real, que es del 81%, 31 convertidos y siete fallados.
-
4
Patrón homenajeado.
Somos muchos los que pensamos que mientras Imanol esté al frente de la nave los txuri-urdin podemos dormir tranquilos. Entre ellos los de la Bultzada, que le homenajearon con un obsequio. El de Orio repartió ayer minutos a varios suplentes aunque se echó en falta ver un ratito a Jon Martín, que a este paso se va a oxidar.
-
5
Una deuda con el Dinamo.
Aunque ahora en Ucrania el fútbol es algo secundario en plena guerra, dolió ver a un histórico como el Dinamo tan desmantelado. El equipo de Blokhin o Shevchenko se merece una revancha de verdad algún día en Anoeta. Ojalá nuestros caminos vuelvan a cruzar.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión