Aperribay: «Sin la ambición de superar este techo, ni Take ni Barrenetxea se quedarían»

No obstante, el medio y largo plazo no está reñido con lo inmediato para el presidente. Por si alguien lo dudaba, «no vamos a la Champions para paser. No. Vamos a intentar ganarla. Otra cosa es que no podamos. No pensamos en el año que viene. Pensamos en la Champions de este año. Pero yo estoy muy contento, incluso después de la derrota contra Osasuna, tras esta semana de tres partidos en la que han participado unos 20 jugadores. Soy al primero al que le gusta ganar, pero construir es lo importante».

Vuela alto esta Real, tal y como plasma el calendario de este superfebrero, pero no deja de mirar más arriba. «Sin la ambición de superar este techo, ni Take ni Barrene se quedarían. La ambición es llegar lo más lejos posible. Queríamos jugar este tipo de competiciones para expresar lo que queremos ser, lo que Donostia y Gipuzkoa quieren que sea la Real, fiel a sus principios, llegando lejos. No tenemos capacidad económica ni estructural para competir con otros clubes que destinan mucho dinero a sus plantillas. Así que tenemos que escoger un camino, ser claros en ese camino y hacerlo muy bien. Por eso insistimos en la metodología y la exigencia. Si escogemos bien, llegaremos lejos. Siendo los mejores día a día».

Han interiorizado el mensaje los jugadores que apuestan por seguir compitiendo en el club. «Las conversaciones con Kubo las empezamos a finales de noviembre. Dede final de año conocimos cuál era su voluntad y su intención de quedarse. Estamos muy contentos con lo que supone su voluntad de seguir creciendo aquí, de construir la Real Socieda del futuro. Nos encontramos con un Take muy receptivo y le estamos muy agradecidos». Preguntado sobre si Mikel Merino podría ser el siguiente en renovar en breve, Aperribay vuelve al raíl. «Lo más importante es que los jugadores estén a gusto en el club, como lo está Mikel. Se trata de que cada futbolista pueda escoger cómo quiere afrontar su renovación. Ojalá pueda cumplir aquí sus sueños individuales y colectivos».

El mensaje hacia el vestuario es de absoluta confianza. A pesar de sumar cuatro partidos sin marcar, asegura que «no es un problema de reaccionar y yo estoy muy tranquilo. El equipo está con muchas ganas. Estamos jugando mejor que el rival que tenemos enfrente pero no hemos metido gol. Solo se supera con trabajo. Estar en tres competiciones a estas alturas no es fácil. Siempre es más fácil cuando focalizas tus esfuerzos en un solo frente. Buscábamos esto y vamos a París con mucha ilusión. Pero también al siguiente partido de liga contra el Mallorca y a la vuelta de la semifinal de Copa. Todos los jugadores están con mucha ilusión. A todos nos gusta ganar pero sabéis que soy muy defensor del día a día y de no meter más presión».

El presidente ve la botella muy llena. «Si estamos en un febrero que nunca ha tenido la Real antes, por querer estar en cuartos de Champions, por querer estar en una final de Copa, por estar en posiciones europeas en liga en el mes de marzo... Si nunca lo hemos hecho antes, significa que el equipo lo está haciendo muy bien. Está compitiendo muy bien. Estoy seguro de que nos vamos a llevar muchas alegrías».

Es optimista, por tanto, un presidente que recalca que «tengo muy buenas sensaciones». Pero como máximo dirigente del club, debe marcar la dirección. «Aprender a perder es importante. Aprender a gestionar los momentos difíciles unidos a cierto estrés o ansiedad es parte del aprendizaje y de la experiencia. Tenemos que recordar que aquel equipo campeón, antes de ganar un título, perdió una liga en Sevilla contra nueve jugadores. En el fútbol, hay que aprender a jugar con estas situaciones y tenemos muchos jóvenes. A partir de ahí, hay que construir para seguir ganando, para seguir optando a competir en estos lugares».

El presidente ve argumentos como para viajar al Parque de los Príncipes con aspiraciones. «Si contamos las ocasiones generadas en los últimos partidos, han sido muchas. Ahora nos enfrentamos a un rival que va a ser muy duro, que aspira a ganar la Champions, como nos gustaría a nosotros. La ilusión es la misma en todos los partidos, porque la ilusión es vestirse la camiseta de la Real».