Alexander Isak, un delantero de videojuego

Ayer fue un delantero de videojuego, con una superioridad insultante sobre los defensas cadistas. Con un ritmo, aceleración y velocidad que más quisieran tener los jugadores del FIFA21 en sus plantillas, fue imparable. En las primeras jugadas en las que intervino su excelente forma física hizo parecer que estaba jugando contra juveniles. Avanzaba con el balón con su característico estilo de ir a trompicones, con una zancada que le permite llegar a las pelotas que incluso se van largas en el control.

Fue así como llegó el primer disparo a puerta del mediodía. Isak consiguió mantener la bola, toparse con Jairo Izquierdo, pasarle prácticamente por encima y tirar. Ledesma lo detuvo. Dos minutos después otro intento suyo se estrelló en el cuerpo de Jairo y en la siguiente jugada quedó claro que el de ayer era su día, al leer a la perfección las intenciones de sus compañeros para siempre acertar en el movimiento del juego sin balón.

El penalti a favor facilitó el trabajo de abrir la defensa rival, pero ya antes se pudo palpar que la Real Sociedad evitó ser ese equipo que domina el juego con posesiones largas para apostar por jugadas más veloces y verticales. Para ello, Januzaj fue el socio perfecto. Con su exquisita técnica no solo para encarar y regatear, filtró balones a la espalda de los dos centrales, y ahí Isak se sintió en su salsa moviéndose al espacio. Oyarzabal, Merino y Januzaj no se cansaron de darle al botón 'triángulo' para pasar al hueco al sueco, al que la intuición de cazador también le sirvió para adivinar la dirección del rechace de la parada de Ledesma y hacer el 4-0.

Se hizo de rogar, pero David Silva reapareció ayer tras mes y medio de ausencia. Entró al campo en sustitución de Asier Illarramendi en el minuto 63 con el partido ya decidido con el único objetivo de acumular minutos de competición. Al contrario de como sucedió en diciembre, el cuerpo técnico y el propio jugador se están tomando con más tranquilidad la vuelta a la actividad, y entre la media hora de ayer y otra semana completa de entrenamientos, el canario estará listo para este tramo final de temporada. Ayer, Silva dejó sus detalles en el centro del campo e incitó siempre a sus compañeros a mover el balón de manera rápida y con dirección al ataque. En el borde del área, donde más imprevisible puede ser, hizo un sombrero a la defensa del Cádiz para prolongar a Merquelanz y hasta tuvo la ocasión de hacer el quinto con un disparo que se fue alto.