Urkullu zanja la polémica con el PSE por el anuncio del TAV: «La coalición no se verá afectada»
El lehendakari defiende que la coalición no se verá afectada después de que el alcalde de Bilbao afeara al consejero Arriola que cerrara el acuerdo con la ministra Sánchez sin su conocimiento
Iñigo Urkullu ha sido escueto y parco en palabras, lo suficiente para evitar alimentar una polémica con el PSE y así zanjar la última controversia que ha salpicado a los socios del Gobierno Vasco a cuenta del acuerdo que ayer se cerró con el Ejecutivo central entorno al Tren de Alta Velocidad (TAV).
El lehendakari, en la tribuna del Fórum Europa, ha eludido en todo momento echar más leña al fuego y arremeter contra los socialistas vascos a pesar de que el alcalde de Bilbao, el jeltzale Juan Mari Aburto, haya reconocido su «enfado rotundo» con Iñaki Arriola. ¿El motivo? Una reunión cruzada entre el consejero de Transportes del Gobierno Vasco y la ministra Raquel Sánchez en Vitoria, donde sellaron sin el conocimiento del regidor bilbaíno que habrá una estación provisional en Basauri hasta la llegada definitiva del TAV a la capital vizcaína. Es más, en el mismo instante en el que Arriola y Sánchez cerraban el acuerdo con un apretón de manos, Aburto se encontraba a casi 400 kilómetros de distancia, en Madrid, manteniendo un encuentro con la secretaria de Estado de Transportes para abordar el mismo asunto. Lo que ha despertado los recelos en las filas jeltzales.
A tenor de las palabras de Aburto, el cabreo del PNV por la falta de interlocución con sus socios ha sido monumental. Sin embargo, el lehendakari Urkullu ha querido despachar cualquier atisbo de grieta interna que pudiera desestabilizar la coalición gubernamental. «La salud de la coalición es excelente. No creo que este tipo de circunstancias afecten ni a la coalición en el Gobierno Vasco, ni a la coalición en otras instituciones, ni a la relación entre el PNV y el PSE», ha manifestado contundente durante el coloquio. De hecho, el jefe del Ejecutivo autonómico no ha querido entrar más en materia y ha ido directamente al grano, al meollo del asunto, en sus propias palabras: «Lo importante es que de una vez por todas podamos contar con el funcionamiento del TAV», ha manifestado a colación de los continuos retrasos que vienen experimentando las obras de la infraestructura ferroviaria.
Los Presupuestos y la UE
Durante su intervención, Urkullu ha hecho un repaso a toda la actualidad pandémica y económica de Euskadi. Pero también ha aprovechado el encuentro -y a preguntas de los periodistas- para volver a exigir al gabinete de Pedro Sánchez que cumpla con el compromiso de transferir todas las competencias pendientes a Euskadi en los términos acordados en el calendario estatutario.
El lehendakari también ha sacado pecho por el proyecto presupuestario más alto de la historia que su Gobierno aprobará para el próximo año. Unas Cuentas autonómicas que superarán por primera vez los 13.000 millones de euros que Urkullu quiere compartir con los grupos de la oposición, según ha insistido. De ahí que haya vuelto a tender la manos al resto de formaciones políticas para ensanchar el acuerdo presupuestario -de momento, Elkarrekin Podemos es la formación mejor posicionada para ello-, aun sabiendo que su Gobierno goza de una mayoría absoluta que hace respirar tranquilos a PNV y PSE.
Igualmente, el máximo representante del Gobierno Vasco se ha referido a la misión de la Unión Europea que estos días visita Euskadi y Madrid con el objetivo de arrojar luz sobre los más de 300 crímenes de ETA que aún están pendientes de resolver. Y aunque Urkullu se ha congratulado -«es de aplauso», ha dicho- de que una comisión de europarlamentarios visite Euskadi con este fin, también ha lamentado que no se hayan puesto en contacto con el Gobierno Vasco para conocer de primera mano las políticas en materia de memoria que lleva a cabo su Ejecutivo. «Pero no lo han hecho, y lo hubiera agradecido», ha lanzado.
