Santano: «Si ponemos Irun por delante, reeditar un gobierno con el PNV es posible»

- Con esta legislatura va a encadenar 21 años cono alcalde, parece usted incombustible… ¿Cuál es el secreto?

- Mantener la misma ilusión del primer día y las mismas ganas de trabajar por esta ciudad. Para ser alcalde hay que tener un enorme cariño por tu ciudad. Esa es mi batería.

- Sin embargo, en esta ocasión su elección ha estado pendiente de un hilo. ¿Temió que la suma de PNV, EH Bildu y Podemos le arrebatara la alcaldía?

- Los resultados que obtuvimos en las elecciones, con incremento de votos y de porcentaje, no nos trasladó una sensación de desgaste, sino todo lo contrario. El haber ensanchado nuestro apoyo era una realidad muy importante. Por otro lado, un acuerdo a la contra iba a ser muy mal entendido por muchos ciudadanos. Confiaba que por una y otra razón, las cosas iban a salir como han salido.

- Pero parece que el PNV de Gipuzkoa sí estaba por la labor de desalojarle. Markel Olano dijo que el caso de Irun era 'especial' y dio alas a Iridoy para que presentara su candidatura…

- Hubiera sido una situación muy difícil de sostener en términos de ciudad e institucionales. Me sorprendieron mucho las declaraciones de Olano. Luego los acontecimientos fueron por otros derroteros.

- ¿El hecho de que Iridoy finalmente retirara su candidatura pudo obedecer a una reconvención del EBB al GBB?

- Ufff...no lo sé, aunque pudiera parecer que así ha sido, pero no tengo información al respecto. Supongo que el PNV hizo su reflexión sobre los acuerdos que tenía con el PSE y, evidentemente, Irun es el ayuntamiento más importante dirigido por los socialistas en Euskadi. Este hecho tenía un peso enorme.

- ¿El mantenimiento de la candidatura del PNV hubiera desbaratado el acuerdo general de ustedes con los jeltzales para el resto de los ayuntamientos e incluso la Diputación?

- No sé si desbaratado, pero desde luego hubiera condicionado de una manera definitiva el ambiente de estabilidad y de acuerdos que existía y existe en Euskadi.

- ¿Estuvo tranquilo en el pleno el sábado? Se lo digo por el precedente de Andoain de hace cuatro años, cuando la abstención de un concejal del PNV, saltándose el pacto con los socialistas, dio la alcaldía a EH Bildu.

- Estuve tranquilo, porque tanto EH Bildu como Podemos anunciaron su candidatura. Desde el día de las elecciones tuve claro que era muy difícil para estos dos grupos dar su voto a un candidato del PNV que no había ganado las elecciones.

- Ya es alcalde. ¿Y ahora qué? ¿Renovará la coalición con el PNV? ¿Propiciará un pacto de legislatura?

- El portavoz del PNV ha declarado que quiere realizar una oposición constructiva. Yo voy a fijarme como meta la búsqueda de acuerdos amplios que den estabilidad al ayuntamiento porque tenemos proyectos muy importantes. Estamos abiertos a negociar con todos.

- ¿Cree posible reeditar una coalición con el PNV?

- Voy a hablar con ellos, pero dependerá de su voluntad. Ahora bien, han anunciado que quieren ser oposición. También es cierto que tenemos capacidad de encontrar apoyos con todas las fuerzas políticas, como ya hemos hecho en otros momentos con Podemos y EH Bildu.

- ¿Si encuentra al PNV proclive a un gobierno de coalición o a un pacto de legislatura, está abierto a estudiarlo?

- Sin ninguna duda. El programa electoral del PNV es perfectamente compatible con el proyecto de ciudad que nosotros defendemos. No vemos diferencias sustanciales. No vamos a tirar nunca la toalla. Además, la opción de un gobierno de coalición tiene cabida porque está dentro del acuerdo marco entre PNV y PSE. Si ponemos Irun por delante y olvidamos los temas personales, puede ser una realidad. Con el PNV y también con otras fuerzas, como Podemos, con quienes hemos tenido en estas últimas tres semanas una reflexión mucho más profunda que en cuatro años. Con ellos, y quizá en menor medida con EH Bildu, hemos visto que tenemos la oportunidad de acordar temas muy importantes.

- Si no logra un acuerdo, el horizonte de una legislatura con PNV, EH Bildu y Podemos en la oposición no parece muy halaguëña.

- Este es nuestro trabajo, generar confianza y estabilidad. Tenemos capacidad de sumar con PNV, pero también con las otras dos fuerzas. Por nosotros no va a quedar. Estamos abiertos y no hay ninguna línea roja.

- ¿Es posible restaurar la relación con Iridoy?

- Tengo claro que las ciudades están por encima de las personas. Ha habido unas elecciones y son un punto y aparte. Algo termina y algo empieza, y se recompone el tablero. A partir de ahí, trabajar por la ciudad y respetar unas reglas de lealtad entre nosotros.

- ¿Qué valoración realiza del acuerdo de gobernabilidad entre PNV y PSE para los ayuntamientos de Gipuzkoa?

- Da estabilidad en el nivel municipal, foral y en el Gobierno Vasco. Ahora bien, también debemos tener una visión panorámica y de futuro. Este es un país plural y hay posibilidades de ensanchar nuestra capacidad de acuerdo con otros grupos políticos, un camino que se irá abriendo en el futuro poco a poco con más normalidad. Hoy por hoy, el acuerdo con el PNV es el que la ciudadanía vasca quiere.

- Otegi ya les ha lanzado el envite de formar gobiernos de progreso. ¿Está lejos un acuerdo entre PSE y EH Bildu?

- Los caminos de colaboración con EH Bildu hay que trabajarlos con mucha tranquilidad. Quizá hay que empezar por algo previo, como la normalización de las relaciones políticas en todas partes y que se abran más vías de diálogo. En Irun, por ejemplo, éstas son muy amplias tanto con EH Bildu como con Podemos. El camino se hace andando, con acuerdos puntuales. Es verdad que el mundo de EH Bildu tiene que resolver tareas pendientes. No obstante, tengo la sensación de que cara al futuro esa mirada va a ir tomando protagonismo.

- Usted reitera que el acuerdo con el PNV es positivo porque da estabilidad pero, ¿no cree que el PSE se desdibuja en los gobiernos de coalición?

- Los resultados electorales indican una posición sólida del PSE, hasta tal punto de que somos un elemento clave para dotar de estabilidad al país. Este hecho es compatible con reforzar nuestro perfil, aunque quizá haya que profundizar en esta línea para evitar el riesgo de que nuestra acción quede desdibujada.

- ¿Ese riesgo de diluirse no se acrecienta ante el deseo del PNV de ampliar sus departamentos en la Diputación a costa de ustedes?

- El día después de las elecciones, el presidente del GBB hablaba de generosidad. Siempre he pensado, y lo digo como partido ganador en Irun, que quien gana tiene que leer los resultados en clave de generosidad y responsabilidad, sabiendo que la estabilidad no se basa solo en la aritmética, en el reparto de carteras. El PNV en la Diputación debe entender que este no es asunto de más o menos peso en un gobierno, sino que también hay aspectos cualitativos. La estabilidad es un valor en sí mismo, va más allá de los escarceos sobre una cartera más o menos. Si no saben leerlo, no me parece que sea una buena reflexión.