El PP de Gipuzkoa cierra filas con Javier de Andrés como única opción sólida para relevar a Iturgaiz

Nada más conocerse hace dos semanas que Feijóo daba luz verde a la celebración del congreso, que finalmente se celebrará el 4 de noviembre en Vitoria, la 'baronía' vasca se aprestó a pedir a Génova que se respetara el sentir mayoritario de los cuadros orgánicos del partido en Euskadi. Y así se va a hacer por expreso deseo del máximo dirigente gallego, que ha dejado la decisión en manos del partido en Euskadi. En este caso, no habrá «dedazo», que en otros tiempos ya se aplicó en Euskadi con el consabido malestar interno.

A pesar de que en el arranque de esta trepidante carrera sucesoria partía de favorita la actual secretaria general, Laura Garrido, euskaldun de 52 años, las opciones de De Andrés se dispararon a lo más alto al recibir en Génova las preferencias del aparato orgánico en Euskadi. Aunque la propia Laura Garrido ha evitado pronunciarse en público sobre su decisión final ante el proceso electoral que se abre hoy mismo –fecha en la que se registran las candidaturas–, se da por hecho que la también parlamentaria vasca renuncie a presentar su candidatura y deje solo a De Andrés en la carrera sucesoria.

Los guipuzcoanos del PP fueron los primeros en avivar la sucesión de Iturgaiz, sobre todo a raíz de las declaraciones que hace un mes realizó en DV su presidenta, Muriel Larrea, al aseguraba que Iturgaiz «como buen líder que es, debería pensar en el mejor relevo para el PP vasco». Las palabras de la dirigente irunesa, que removieron las estructuras del partido, fueron premonitorias, pese a que desde la oficialidad del partido se quiso restar importancia a esta 'sugerencia' porque Génova priorizaba en las fechas en las que se publicó la entrevista –primeros de septiembre– la investidura fallida de Feijóo que se celebró a finales del pasado mes.

El PP de Gipuzkoa buscará contar con un representante en la futura dirección que diseñe De Andrés. Tradicionalmente se busca el equilibrio territorial. Y por este motivo, Larrea intentará que uno de los suyos –el portavoz en Juntas, Mikel Lezama, tiene todas las papeletas–, pueda desempeñar un alto cargo en la futura dirección del PP vasco.