Un inicio de curso que guarda el verano en la maleta

Los txistularis de la banda municipal de Donostia han amenizado la llegada de los consejeros, que tuvieron como anfitriones a la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, al alcalde de Donostia, Eneko Goia, y al presidente de las Juntas Generales, Xabier Ezeizabarrena. A la llegada de los consejeros apenas se les ha podido ver conversando brevemente, contando seguramente dónde han pasado su periodo vacacional. Además, todos ellos han lucido en sus vestidos y chaquetas una insignia dorada con el logo del Gobierno Vasco.

Ya más sueltos se les ha visto a los miembros del gobierno cuando esperaban la comparecencia del lehendakari. Sentados en primera fila Ubarretxena conversaba con Mikel Torres, mientras Mikel Jauregui, Noël d'Anjou Olaizola e Ibone Bengoetxea han compartido confidencias entre risas. Ya durante el discurso, el lehendakari ha puesto en valor el Jaialdi celebrado en Boise. Allí estuvo Pradales, quien aprovechó la visita para quedarse unos días más en Estados Unidos para hacer turismo. Al inicio de su rueda de prensa también ha querido recordar a las ocho personas fallecidas en las carreteras vascas.

Ha sido el segundo inicio del curso del lehendakari Imanol Pradales en Miramar y, en esta ocasión, la lluvia también ha hecho su breve aparición. Aunque no como el año pasado, cuando los por entonces nuevos miembros del gobierno estrenaron el curso con paraguas en mano, alguno incluso calado.

Ya por la tarde, con el primer examen del curso aprobado, el lehendakari ha aprovechado su visita a Donostia para atender a su agenda personal y buena parte de los cargos del Gobierno Vasco han comido en un restaurante del barrio de Benta Berri.