El fiasco del PP en Colón
El foco ·
La presencia del PP en Colón ha resultado todo un fiasco. Casado se dejó llevar por el 'ayusismo' y no supo frenar ese envite contaminado. ... El líder del PP debió alejarse de este acto en el que, como en la anterior ocasión, no tenía nada que ganar porque arrejuntarse con Vox resta al partido credenciales para ser solvente alternativa al Gobierno de Sánchez. Díaz Ayuso, que va por libre y más desde su incontestable triunfo madrileño, le puso en un brete a Casado al anunciar su asistencia a la concentración desde el mismo momento en que se convocó. Casado se vio entre la espada y la pared. Pudo haber rechazado la envenenada cita y convocar una alternativa con sello del PP, pero prefirió seguir la estela de Ayuso quien, además, dinamitó de manera irresponsable el discurso del líder del PP en Colón al implicar al Rey con los indultos. Sorprende que Casado tardara casi un día en distanciarse de esas invectivas de Ayuso, que contravienen los principios constitucionales del partido desde su fundación.
El acto de Colón, del que huyeron despavoridos los barones moderados del PP -los que tienen mando en plaza en sus comunidades- ha acabado como el rosario de la aurora para la hasta ahora aparente armonía interna del partido. Que Ayuso mantenga su desafiadora postura sobre los indultos, hablando de «trampa» al Rey y de que su líder piensa lo mismo que ella, empieza a parecerse más a un pulso interno en toda la regla. Una lucha de poder. Casado, que está pagando en sus propias carnes un error de principiante, deberá erradicar del argumentario de su partido cualquier pronunciamiento que cuestione el papel constitucional del Rey porque erosiona la propia esencia del partido conservador. La presidenta madrileña, a la que jalearon en Colón más que a Casado, mantiene un peligroso órdago a su presidente y mete al partido en un enredo de imprevisibles consecuencias.
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