Expertos y politólogos apuestan por profundizar en la gobernanza colaborativa de Gipuzkoa

Después de dos días frenéticos repletos de ponencias y actividades didácticas en las que han participado expertos de diversas disciplinas y politólogos de universidades de prestigio como las de Harvard, Oxford, New York University, George Washington, la Rey Juan Carlos o la Universidad de Barcelona, el cónclave bajó este martes el telón ofreciendo varias conclusiones. Argumentos que llegaron después de recoger las aportaciones de los comités asesores en las cuatro áreas que se han trabajado y cuyo objetivo era, además de dar a conocer el proyecto guipuzcoano, empaparse de las experiencias de gobernanza colaborativa más avanzadas a nivel global para fortalecer y consolidar el camino que la Diputación foral del territorio emprendió hace cinco años.

Y es que, precisamente, una de las conclusiones del congreso fue que la gobernanza colaborativa es una herramienta estratégica esencial para el desarrollo de cualquier sociedad. «Hay que edificar la idea del poder compartido». «Las soluciones no dependen únicamente de los gobiernos, sino de la implicación de la sociedad en su conjunto». «Es conveniente desaprender para volver a aprender e instaurar una democracia colaborativa».

Estas son solo algunos de los aprendizajes que ha dejado el congreso y que destacaron los expertos. Y que también asumió como propios el diputado general de Gipuzkoa. «Se trata de un modelo de gobernanza en el que la sociedad participa y contribuye a las políticas públicas que afectan a su futuro; se trata de un proceso que debemos seguir mejorando», defendió Markel Olano. Un planteamiento «imprescindible», coincidieron, para «garantizar la continuidad» del proyecto.

De esta manera, expertos de todo el mundo han estado reflexionando sobre los retos a abordar en el futuro y las líneas de actuación que debe asumir Etorkizuna Eraikiz para continuar su desarrollo. Y, con las cuatro áreas de trabajo como eje central de los debates, los expertos llegaron a la conclusión de que la gobernanza debe servir para cerrar brechas sociales, «contribuyendo a la redistribución de la riqueza y la integración social». Respecto al papel que juega la política, apuntaron que la capacidad de cooperación entre administraciones es «crítica» y que la gobernanza -insistieron- debe construirse sobre las bases éticas compartidas.

Igualmente, en cuanto a la aportación de la sociedad en todo este proceso, abogaron por crear una nueva cultura política ciudadana. «No podemos impulsar la gobernanza sin crear espacios de conexión», dijeron. Además, señalaron a la juventud como uno de los ámbitos de mejora.