Los partidos vascos cargan contra Casado por prometer que recuperará Prisiones si gobierna

La polémica llega apenas tres días después de que el Gobierno Vasco asumiera la transferencia de Prisiones por parte del Ejecutivo central, después de cuatro décadas de reivindicación de la competencia penitenciaria. El primero en reaccionar ayer fue el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, que tachó de «bravuconada» la amenaza de Casado de revertir la transferencia de Prisiones si llega a gobernar y auguró una larga vida al Ejecutivo de Pedro Sánchez «y los que le apoyamos» si el líder del PP sigue por el mismo camino. Advirtió de que el escoramiento hacia la «extrema derecha» de Casado «le acerca más a Orban que a Merkel» y señaló que la «involución total» que los populares plantean para el Estado autonómico sitúa al PNV «en las antípodas» de la posición que defiende el PP.

Ortuzar, en una entrevista en Radio Euskadi, restó importancia a las palabras de Casado en la convención de Valencia y achacó su «bravuconada» a que estaba «en una plaza de toros y supongo que quería salir por la puerta grande». «Pero más cornadas da la vida», le avisó siguiendo con los símiles taurinos. El presidente del EBB recordó que Cataluña gestiona desde hace décadas la competencia de Prisiones y que gobiernos del PP presididos por Aznar o Rajoy «no movieron un dedo para quitar esa transferencia» ni siquiera con mayorías absolutas. Además, indicó que «la propia ley que tanto sacralizan los del PP no les permitiría hacer eso que ahora anuncian».

Sin embargo, Ortuzar se mostró más crítico con el tono del mensaje de Casado porque «revela un estado de ánimo y un corpus ideológico que hace que nos sintamos en las antípodas de ellos». Lamentó que «como el PP no puede con Vox por la razón, ahora quiere hacer de Vox», lo que calificó de «grave error para el PP y para la convivencia en el Estado español».

El líder jeltzale lanzó un mensaje a Casado –«nadie gana las elecciones desde los extremos»– y vaticinó que, si el PP sigue por esta senda, «va a haber Gobierno de Sánchez y los que le apoyamos por largo tiempo, porque lo que se nos pone enfrente es la involución total». Añadió que, con estos planteamientos, Casado «quiere poner patas arriba nada menos que el sistema constitucional en el ámbito autonómico».

Por parte de EH Bildu fue su portavoz en el Congreso, Mertxe Aizpurua, la que desacreditó el anuncio de Casado y aseguró que, en estos momentos, «no hay ninguna diferencia entre el PP y Vox», que a su juicio pretenden poner en marcha «una contrarreforma autoritaria» en el Estado que «no sería para nuestro bien». Aizpurua advirtió de que «la postura mostrada por el PP y Casado seguirá esa senda en los próximos meses y, seguramente, se va a endurecer», por lo que pidió cerrar filas entre las fuerzas de izquierdas y soberanistas.

El portavoz del PSE en el Parlamento Vasco, Eneko Andueza, censuró que «el PP no cree en el autogobierno vasco, no cree en el Estatuto y no cree en la Constitución, esa que tanto dicen defender sus dirigentes». Añadió que «lo único que cabe» ante anuncios como el de Casado es «pedirle que respete la ley, a la sociedad vasca y a sus instituciones».

Andueza indicó que «el PP sabe, o debería saber, que la transferencia de las prisiones vascas se ha producido por los cauces que marca el Estatuto y utiliza este asunto sólo porque considera que le puede reportar votos en los caladeros de la ultraderecha». Lo que, en su opinión, es un intento de «atacar el autogobierno vasco con una regresión autonómica que va contra el Estatuto».

La portavoz parlamentaria de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, censuró que Casado recurre al «trumpismo» y «habla por hablar» cuando asegura que recuperará la competencia de Prisiones, y subrayó de que la transferencia «no se puede revertir» porque el Estatuto «es ley constitucional y hay que cumplirla».