Un menú degustación

Un día más en el ciclo JazzEñe, donde nos esperaba para empezar EME·EME·Project que, desde las miras del jazz, abarca géneros desde el ... R&B hasta el Hip-Hop. Es una propuesta fresca, viva. Con un sonido que se nota trabajado y consolidado. Y ellos lo saben. La gran voz de Antonio Tomás empasta perfectamente con la de Marta Mansilla, que ejerce también de flautista, realizando apariciones esporádicas y fantásticos solos, en los que la flauta se convierte, con un aire percusivo, en parte del propio groove que cocina la sección rítmica. Tampoco faltaron pedales, sintes y cachivaches varios, al servicio del bien común, dando como resultado una energía brutal, que hizo que el bolo fuese de esos en los que al término hacen plantearte si quizás deberías comprarte el CD. También pudimos disfrutar de Cuarteto Federal, que acabó de facto con toda mezcla o fusión. Un jazz más al uso, puro, pero libre y actual, con repertorio compuesto de temas de todos los sabores. Aunque a ratos nos hicieron dudar de si estábamos en Jazzaldia o en una actuación de Les Luthiers, ya que, a diferencia de otros que guardaban los preciados minutos para exprimirlos con música, estos no tuvieron complejo en coger el micro y hasta buscar el chiste. Dicho sea, para el agrado del público.